Inteligencia empresarial: una necesidad para el éxito

Desayunos ComputerWorld: business intelligence a consulta

“Cuando no se crece se palidece”. Con estas palabras Jaime García, director de análisis de IDC España, resumía en una mesa redonda organizada por ComputerWorld, el objetivo que persigue un concepto tan contagioso en términos empresariales como lo es business intelligence (BI). El ecosistema de negocio actual no sólo demanda adecuar todos los procesos a un entorno de trabajo en tiempo real, sino que exige anticipación a los hechos. Esta ‘bola de cristal’ ya rueda, y cómo: en 2007 los ingresos generados por el software de BI alcanzarán los 1.500 millones de euros, según los últimos estudios.

En un mundo tan globalizado y tecnológico como el actual, los obstáculos a la hora de poner en marcha negocios son cada vez menores, pero esta situación ha generado otro enemigo no menos peligroso, la competencia. Algo que ha permitido que las pymes dejen de estar sometidas a la dictadura de las grandes corporaciones, tal y como lo explica Pilar Martínez, directora de canal de SAP España: “En SAP nos gusta puntualizar sobre los mitos que existen entre las empresas grandes y las pequeñas. Una cosa es el tamaño de una empresa y otra muy distinta lo que esa empresa puede llegar a ser. Por eso es importante disponer de una plataforma tecnológica que sepa manejar el presente y permita evolucionar al ritmo exigido. En las pymes los riesgos son mayores y se requiere una mayor flexibilidad para sobrevivir a las condiciones de mercado actuales. Para apostar al caballo ganador es importante contar con un proveedor tecnológico de garantías. Si se apuesta por una carrera de fondo, las zapatillas (el proveedor) deben poseer una suela que aguante durante años y garantice escalabilidad”.

Elegir bien es clave
La elección del proveedor tecnológico es algo que preocupa mucho a la hora de migrar las estructuras de TI para convertir la empresa en un negocio ‘inteligente’. Alberto Quevedo, director de sistemas y procesos de Cosentino, empresa dedicada a las soluciones de soluciones para el hábitat privado y público basadas en piedra natural, explicó la metodología que se llevó a cabo en su caso: “Se hizo un estudio de las necesidades de la empresa a corto y medio plazo y después se buscó un proveedor. Sabíamos que necesitábamos un ERP, e hicimos un estudio de costes de licencia, hardware, mantenimiento, migraciones, escalabilidad… También analizamos la viabilidad financiera del proveedor, su capacidad de evolucionar tecnológicamente, el número de consultores… Después tuvimos demostraciones y posteriormente evaluamos a cada proveedor. Al final lo que inclinó la balanza en la decisión fue la viabilidad y las garantías económicas de uno de ellos. Fue un proceso que duró un año”.
La solvencia financiera y la capacidad de innovación fueron dos aspectos muy valorados por casi todos los asistentes a la hora de elegir un proveedor. Y es que el crecimiento tecnológico de la empresa depende, y mucho, de la capacidad de innovación de su partner. Javier Puig, director TI de Suministros Garcamps, empresa enfocada en el negocio de la venta y alquiler de maquinaria de construcción, así lo ratifica: “Es vital que tu proveedor crezca tecnológicamente con la empresa. Nosotros, por ejemplo, nos estamos centrando en SOA porque queremos estar más cerca de los clientes. SOA se ve muy bonito pero necesitas saber cómo se va a orquestar todo eso en términos de la seguridad. Me gusta el paso que ha dado SAP comprando Maxware porque te da la sensación de que estás bien acompañado”.

Sin miedo a rupturas
Algunos de los expertos que participaron en el encuentro, aconsejaron, incluso, romper la relación con el proveedor tecnológico siempre que no se esté seguro del mismo, aunque el proceso de migración ya haya comenzado o se encuentre muy maduro. Así lo asegura Mónica de Pablos, directora de sistemas y organización de Insitu, empresa que gestiona diversas marcas de moda, entre ellas, Trucco: “Nosotros dimos marcha atrás. Teníamos claro que necesitábamos un ERP y buscábamos a alguien con experiencia, alguien que supiera entender nuestras necesidades dentro de un sector tan peculiar como el de la moda. Al final seleccionamos una empresa, pero a los seis meses vimos que no se adaptaba a lo que necesitábamos y anulamos el proceso. En ese momento SAP pudo ofrecernos una solución retail a medida. Llevamos seis años con esa plataforma y estamos contentos. Mi opinión es que siempre hay que detener un plan de crecimiento o migración tecnológica si así se requiere. No hay que tener miedo a dar el paso”.
Luis Valenzuela, director comercial de SAP España, puntualizó las palabras de Mónica de Pablos: “Antes de elegir un proveedor, se necesita tiempo para analizar el negocio; es fundamental. Si se hacen las cosas deprisa, algunos parámetros, como por ejemplo el precio, empiezan a tener una relevancia excesiva respecto a otros. Además, después de ejecutar la migración es importante elaborar un plan de aprendizaje para que todos los empleados se familiaricen con las nuevas herramientas”.

Duplicar los ingresos con la misma plantilla
Otra de las dificultades a la hora de acometer la reestructuración reside en los reparos de los responsables de muchas pymes a la hora de invertir en TI. En diversas ocasiones, tal y como afirmaron varios de los asistentes, se trata de empresas familiares con miedo a la evolución tecnológica. Roberto Cuadrado, director de TI del Grupo Neo, empresa especializada en acabados de post-impresión, señaló: “Nosotros afrontamos la migración al revés que la mayoría. Las empresas crecen y después buscan soluciones, nosotros invertimos la pirámide. Cuando llegué a la empresa les dije que había que cambiar el modelo, y que lo lógico sería analizar hasta dónde quería llegar la empresa y preparar las infraestructuras de TI hasta ese punto. Al principio hubo un poco de resistencia, pero acabaron por entenderlo. Finalmente, implantamos un ERP con SAP. Esto fue hace unos 4 ó 5 años y desde entonces hemos duplicado la facturación con la misma plantilla. Es una infraestructura que nos permite ser ágiles en el sector de la post-impresión, en el que los todos procesos tienen que ir de forma muy precisa y también con mucha rapidez”.
Después de dar el salto y arrancar con nuevas herramientas de trabajo, el siguiente escollo se encuentra en el terreno de quienes van a utilizar esos nuevos aperos. Vicente Rovira, del departamento de organización de Lubasa, dedicado a actividades de construcción, inmobiliarias y de gestión medioambiental, expresó la necesidad de que todos los departamentos se responsabilicen de la puesta en marcha de la nueva metodología de trabajo: “En una empresa todos deben ir de la mano en evolución tecnológica. Para que todo vaya bien no puede caer toda la responsabilidad en el departamento de sistemas, y hablo especialmente de la formación del personal en las nuevas las herramientas”.

Miedo a los cambios
La palabra ‘miedo’ vuelve a saltar a escena cuando se habla del cambio en la forma de trabajar que toda nueva plataforma implica. Según Mónica de Pablos, de Insitu: “En el sector de la moda hay mucho miedo a ponerse delante de un PC, el personal suele tener pánico a los cambios. El departamento de sistemas fue quien llevó a sus espald

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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