Formación informática adaptada al puesto de trabajo. La Generalitat de Catalunya fomenta el empleo de las redes informáticas en las empresas.

Las empresas disponen, normalmente, de equipos informáticos, pero éstos están generalmente infrautilizados. Esta es una de las conclusiones a que ha llegado la operación Trabajar en red, puesta en marcha por el departamento de Trabajo de la Generalitat de Catalunya, a través del Centro Divulgador de la Informática. En esta experiencia, en la que han participado 100 empresas catalanas, se ha intentado que los usuarios de ordenador aprendieran a trabajar en red, a relacionar las informaciones unas con otras para asi mejorar la competitividad y trabajar mejor.

La operación Trabajar en red ha consistido en prestar, a través de un experto, formación a medida en el puesto de trabajo, y ha alcanzado a un total de 810 personas. Paralelamente, se acogió a 72 jóvenes parados para proporcionarles formación teórica previa en el CDI y posteriormente realizaron prácticas en diversas compañías. Para llevar a cabo el proyecto, el CDI contactó con 1.800 empresas, de las que 910 respondieron una encuesta sobre cómo utilizan los ordenadores. Posteriomente, se realizaron otras 570 encuestas, a través de las cuales se seleccionaron las cien empresas que han participado en el plan. En palabras del director del Centro Divulgador, Santiago Guillén, con esta campaña se ha intentado ayudar a que las empresas trabajen en redes de ordenadores.

Al finalizar la operación, 50 compañías habían alcanzado el nivel 5 (bajo), 45 habían llegado al nivel 20 y tan sólo cinco empresas habían llegado al 65 % de lo que se entiende por trabajar en red. Para Guillén, esta diferencia y el limitado resultado se debe a que antes de trabajar en red, se ha de perfeccionar el trabajo individual de los usuarios de informática. Es más fácil hacer trabajar en red a personas que ya tienen una habilidad con la herramienta de forma individual, explica. No obstante, el CDI esperaba mejores resultados de la campaña. En opinión de su director, trabajar en red significa mejorar la competitividad de la empresa y trabajar en mejores condiciones. Según explicó Josep Mª Servitje, director general de Ocupación de la Generalitat de Catalunya, durante la presentación de los resultados de la campaña Trabajar en red, hace tiempo que llegamos a la conclusión de que lo mejor era hacer acciones de tipo innovador. En el campo informático ya hay una gran red de centros de formación, pero hacía falta hacer algo nuevo. Para Servitje, las empresas que han tomado parte en la campaña han demostrado tener una sensibilidad en una cuestión tan importante como es la formación continua en el seno de las empresas, que es un elemento fundamental de competitividad y uno de los objetivos de la acción realizada por el CDI. No se ha de considerar la formación continua como un coste, sino como una inversión. Y esta acción lo demuestra de una manera palpable, afirma. Según Servitje, el departamento de Trabajo tiene dos funciones importantes en la formación ocupación: la formación para la inserción y la formación continua, y en esta campaña se han ligado los dos campos.

AUDITORIAS, LAS DE MAYOR INICIATIVA

Por nivel de facturación, las empresas que predominan en la operación son las que están entre los 1.000 y 1.500 millones de pesetas, con el 33% del total. Además, estas son las compañías más predispuestas a apreciar la propuesta de la Generalitat. Por sectores, la siderurgia y el textil son los que mayormente han participado en la campaña, seguidos de servicios, construcción y artes gráficas. Según Guillén, las auditorías son un negocio que va muy bien y que está llevado por personas con mucha iniciativa. Por ello también son las que más ha participado en la campaña. En relación al personal, el 43% de las empresas del estudio poseen menos de 50 trabajadores; el 35%, entre 50 y 100, y el 22% para las de más de 100 trabajadores.

En esta campaña se ha tratado sobre todo el ámbito de los PCs, pero si se incluyen miniordenadores, la mitad de las empresas disponen de estos equipos, asegura Santiago Guillén. Respecto a las redes, el 25% de las empresas están dotadas de estas herramientas de comunicación empresarial. Sin embargo -aclara- tener red y utilizarla no es lo mismo. Hay más equipos de los que se utilizan. Esto nos tranquiliza, en el sentido de que podemos decirle a la mayoría de las empresas que no les vamos a animar a comprar más, sino a aprovechar lo que ya tiene.

Los cursos de formación se han realizado en la empresa y de forma individualizada. Se trataba de hacer más accesible la formación. Muchas veces se ha de salir del ambiente de trabajo, afirma el director del Centro Divulgador. De este modo, la respuesta de los empleados a los cursos ha sido positiva: el 16,6% de los participantes han considerado el nivel muy alto y el 65% bastante alto, mientras que no demasiado el 11%. En cambio, para la gran mayoría la duración de los cursos no ha sido suficiente. Es una respuesta que, sobre todo para las empresas, es muy importante. Se podría avanzar mucho haciendo un pequeño esfuerzo en más formación específica para la gente que utiliza informática, ya que la disposición del personal es positiva, indica Guillén.

INSUFICIENTE TRABAJO EN RED

Las conclusiones más importantes obtenidas por la operación Trabajar en red son el bajo nivel de aprovechamiento de la informática en el uso individual y el insuficiente trabajo en red, aunque el director del CDI matiza que existen diferencias importantes entre las empresas. Asimismo, las empresas han considerado muy útil esta formación porque no ha roto el ritmo de trabajo y se han aprovechado los equipos existentes en las compañías. Según Guillén, también ha sido muy importante y justifica acudir a la empresa a dar la formación el hecho de que la organización aprenda: cada individuo aprende según el trabajo que hace y esa organización es más sabia al final. No obstante, el éxito en el uso de las redes informáticas no se explica por la dimensión de la empresa, sino porque la dirección de la empresa se compromete a que funcione, cuando la organización respeta mucho al cliente o éste es lejano, comunicar información es muy valorado; pero también cuenta la implicación del personal y que el jefe de informática no se vea a sí mismo como un técnico puro, sino también como un gestor, como una persona que quiere ayudar a que la empresa trabaje de cara al cliente, que el personal aprenda, etc., asegura.

EN EL 93, SEGUNDA EDICION

De cara al 93, Guillén considera que habrá mucho a ganar, simplemente haciendo lo mismo, pero incorporando la formación a distancia, vía modem, con el Centro Divulgador de la Informática. Esto no lo hemos hecho nunca, pero creemos que podría funcionar con la ventaja de que la gente continuaría sin moverse del puesto de trabajo, añade el director del CDI. El abanico de equipos que entrarán en la siguiente operación se verá ampliado a miniordenadores y sistemas Unix, AS/400 y modems, etc. También se ha estudiado que los dirigentes más implicados de las empresas participen en un seminario para identificar proyectos interesantes con los cuales mejorar las finalidades de los negocios. A partir de ese seminario, las decisiones que se tomarán se convertirían en prácticas. Esta recomendación del Centro Divulgador de la Informática podría alcanzar a la tercera parte de las empresas que han tomado parte en actual campaña.

En cuanto a los jóvenes parados, el segmento más interesante son los que están finalizando los estudios de empresariales o económicas, quienes realizan prácticas en empresas con herramientas informáticas aplicadas a la gestión y simulación económica. Otra línea más completa para estas personas son las empresas en las existen redes informáticas importantes y necesitan para su operación la figura de un coordinador de redes. Por último también se contempla el intercambio internacional con la combinación telemática con un centro italiano de Bolonia (EFAL).