Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya
Vías abiertas al 2000
Mayor comodidad, seguridad, rapidez y regularidad de los trenes son los objetivos planteados por Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya. Y para entrar en el siglo XXI con buena vía está implantando avanzados sistemas de información que permitirán mantener la máxima de la compañía: "Servir al cliente". En los próximos meses iniciará Estaciones 2000, un ambicioso plan de modernización de las estaciones que incluye sofisticadas máquinas de autoventa y la gestión remota de escaleras, monitores y megafonía.
FGC es una joven empresa que ha reformado profundamente su red desde el traspaso de competencias al gobierno catalán y su creación en 1979. En los últimos años la fotografía tecnológica de FGC ha variado drásticamente. Desde los primeros McDonnell Douglas, dedicados a la gestión financiera de la entidad, la empresa ha ido expandiendo la TI hacia el área técnica, la gestión de almacenes y la de mantenimiento. En ámbitos como el control de tráfico, los enclavamientos controlados por relés y sistemas mecánicos han dejado paso a los chips.
Como explica José Luis Infiesta, Director de Sistemas de Información de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya, la informática de gestión y la informática de control en tiempo real (dependiente de instalaciones eléctricas) eran dos mundos que históricamente convivieron separados. El nuevo departamento de informática se encarga de crear la nueva infraestructura de sistemas de información. "A medida que crece, se decide ir a una visión más corporativa y establecer la tendencia tecnológica a la que se dirigirá la compañía", afirma Infiesta.
La compañía apuesta por una arquitectura abierta, con una solución basada en el trío HP 9000 y 3000, la base de datos Informix y aplicaciones cliente/servidor. Al mismo tiempo las comunicaciones experimentan un crecimiento importante. La necesidad de integrar una informática con una elevada dispersión geográfica lo exigía.
Cuando Infiesta se encarga de la dirección del departamento de informática de FGC, hace más de dos años, se encuentra con que el cambio tecnológico a abordar ya estaba iniciado. El reto era organizar y ejecutar su implantación. A pesar del alto compromiso con la tecnología, era necesario comenzar a implantar herramientas como el correo electrónico y solucionar el grave problema de las comunicaciones.
La macroárea tecnológica de la compañía es complicada de organizar porque, en su opinión, hay que compaginar el día a día de la explotación con la gran variedad de proyectos. Excepto de la informática, una sección se encarga del desarrollo de planes de comunicaciones, enclavamientos, control y estaciones, y otra cubre el mantenimiento. Informática aglutina todos los procesos. El CGX (centro de gestión de la red) incluye el SAU (centro de atención al usuario) y la GX (gestión de la red). En el fondo, el control de proyectos es uno de los objetivos prioritarios del departamento y, por ello, lo está consolidando: "Hacemos del orden de 150 proyectos anuales", asegura Infiesta: desde los estratégicos y críticos para la empresa (como su contribución a la puesta en marcha del Metro del Vallès) hasta pequeños cambios de una señal de tráfico. Afianzar el mantenimiento y poner a punto los grandes proyectos tecnológicos como el emblemático Estaciones 2000 o la adecuación de procesos y sistemas de información, generado en los últimos años, también forman parte del catálogo de finalidades.
Cuando José Luis Infiesta se encarga del departamento, se encuentra con una informática obsoleta (aún se mantenían los McDonell Douglas): aplicaciones adaptadas a los HP corriendo en el entorno Pick Universe convivían con las aplicaciones basadas en la nueva estrategia Unix, Informix y cliente/servidor. Un dato da idea de la magnitud del asunto: la obsolescencia afectaba al 85% de las aplicaciones (gestión económico-financiera y de personal). Junto con Andersen Consulting realizan un estudio de integración y sistemas de información para hacer balance de la situación tanto a nivel tecnológico como funcional de las aplicaciones. Su experiencia con esta compañía, "que es dilatada, nos hace que trabajemos con sus herramientas pero con una gran implicación nuestra.
Fue un estudio ambicioso: realizar un plan de sistemas de información para actualizarlos". Este informe se somete posteriormente a un proceso interno de maduración cuya conclusión fundamental es clara: "No hablábamos de un plan tecnológico, sino de un proyecto de empresa". Se diseña un pequeño modelo simplificado de gestión, cuyo núcleo son los procesos, "más que la tecnología", y en donde los recursos humanos son indispensables como soporte. Para dar servicio al cliente se generan una esfera tecnológica basada en sistemas de gestión económico-financiera, planificación de los recursos humanos y de personal, la logística y el mantenimiento de la explotación del servicio y la gestión comercial. Por encima de todo ello, un sistema EIS. "¿Qué haremos en un futuro?, se pregunta Infiesta. Después de adoptar la arquitectura basada en HP 9000, con base de datos Informix y herramientas cliente/servidor, la cuestión está ahora en analizar los paquetes informáticos que se implementarán en esa estructura. La elección se basará fundamentalmente en la flexibilidad para adaptarlos a las necesidades de FGC y el grado de implantación. "El usuario será finalmente quien elegirá las herramientas", asegura el jefe de informática.
Arquitectura abierta
El centro de proceso de datos (CPD) cuenta con equipos de gestión y desarrollo: 2 HP 9000 (explotación y desarrollo, respectivamente) y un HP 3000 (con aplicaciones antiguas) a sustituir. El servidor de red cubre el área económico financiera y la de personal. Un servidor Pentium se instalará cuando se inicien las actividades de desarrollo en intranet. El servidor ofimático, "apostamos totalmente por los productos de Microsoft", dice Infiesta, corre sobre Windows 3.11: "De momento no nos planteamos cambiar porque estamos amortizando la inversión, pero posiblemente en el futuro vayamos a NT". Son decisiones, no sólo de hardware, sino también sobre el concepto de CPD, en las que colabora Hewlett-Parckard. "El panorama no es el mismo de hace unos años: ahora se nos puede caer una red o un servidor y éste puede estar conectado a la venta de títulos [de transporte] o por ejemplo con las ´listas negras´ de VISA (actualización en línea). Hemos de estudiar las herramientas que nos permitan redundancias, tener sistemas de seguridad, intervenir en el CPD desde el exterior, etc.", afirma.
Del CPD cuelgan una serie de redes locales ubicadas por distintas unidades (talleres, transportes, gerencia, etc.). "Nuestra pretensión es tener un anillo de fibra óptica", confiesa Infiesta. La fibra, una de las estrellas del plan Estaciones 2000, afectará positivamente a toda la empresa. Para cerrar el inacabado círculo, FGC ha llegado a un acuerdo con Autopistas para compartir recursos, y todavía falta extenderla por algunos tramos de vías en reformas. El resto de explotaciones (tren cremallera de la Vall de Núria y las estaciones de ski de La Molina) utilizan las líneas RTC y Frame Relay, dejando la RDSI como salvaguarda: "La RDSI es un muy buen recurso para establecer comunicación, pero tiene carencias para disponer de estaciones de trabajo que exigen un largo periodo de conexión al CPD". En algún caso, para comunicaciones estratégicas (dirección) se ha optado por líneas punto a punto. En total, cuenta con más de 400 PC localizados en distintas redes locales. "Hemos tenido que potenciar las herramientas que nos permitan la monitorización de los equipos desde el CPD.
Cuando toda la gestión informática pasa a la gestión de la producción se genera el proyecto SMEC (Sistema Magnético de Expendición y Control). En un primer nivel afecta a las estaciones: se sustituyen los títulos en soporte papel por otros con soporte ma