¿Están preparados los fabricantes de ERPs para la llegada del euro?
Trabajan contrareloj para convertir sus procesos
Los días de la peseta española están contados. Igual que los del franco francés, el marco alemán, y otras nueve monedas nacionales europeas que desaparecerán el próximo 1 de enero, cuando la nueva moneda europea, el euro, entre en circulación masiva. Unos 14.500 millones billetes de euro y 50 mil millones de monedas verán la luz en esa fecha, según se ha señalado desde el Banco Central europeo, tratándose de una operación masiva.
Las empresas en la zona del euro -que incluye Austria, Bélgica, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Holanda, Portugal, y España- deben completar el laborioso proceso de convertir todos sus procesos financieros a euros antes de que finalice el año. Aunque algunos países ya han estado operando en euros durante meses, dado que se vienen utilizando como moneda legal en forma electrónica desde 1999, otros lo van a tener más difícil. Además, los datos históricos también deben ser convertidos, e incluso empresas fuera de la zona del euro que tienen muchas operaciones dentro de ella -el Reino Unido, por ejemplo- deben actualizar los procesos para manejar la nueva moneda.
Facilitar el gran cambio
Todo esto ha puesto a los fabricantes de software ERP a trabajar frenéticamente para facilitar a sus clientes el gran cambio. Así, los programadores han estado preparando las actualizaciones y cajas de herramientas para la conversión de moneda durante varios años. La moneda única ha estado preparándose desde que se realizó el programa europeo para la Unión Económica y Monetaria (UEM) en 1992. Fuentes internas a Oracle, uno de los más conocidos fabricantes de ERPs, han señalado que llevan trabajando internamente en este tema desde hace cuatro años, desde el lanzamiento de la versión del software R11, en 1998. “Desde entonces, aseguran, tenemos una solución viable para ofrecerles”. SAP, por su parte, asegura haber comenzado a trabajar en este tema desde 1996 y señala que sus clientes más importantes como DaimlerChrysler y Siemens ya lo han hecho.
En el caso de J.D. Edwards, la compañía ha llegado incluso a informar a sus clientes por correo certificado de las medidas que debían tomar para migrar sus sistemas al euro. De tal forma, que al menos, no pudieran decir que no estaban notificados ya que desde hace más de un año y medio la funcionalidad del euro se añadió completamente a las actualizaciones normales.
Servicios de consultoría
Los proveedores de ERP ofrecen servicios de consultoría para ayudar a los clientes a realizar fácilmente el cambio, un proceso que puede llevar desde un fin de semana largo a varios meses. Estos servicios de soporte y consultoría son ofrecidos por casi todos los fabricantes tanto “in house” como de forma remota. Finalmente, los expertos también advierten a las empresas no descuidar los recovecos inesperados de su estructura informática en que pueda necesitarse la conversión al euro. Incluso los sistemas periféricos que no sean examinados de cerca -las plantillas electrónicas que se utilizan una vez al año para la planificación financiera, o los documentos de procesamiento de textos que contienen listas de precios- necesitarán conversión. Y no hay que olvidar las aplicaciones de comercio electrónico, por supuesto.
Las empresas en la zona del euro -que incluye Austria, Bélgica, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Holanda, Portugal, y España- deben completar el laborioso proceso de convertir todos sus procesos financieros a euros antes de que finalice el año. Aunque algunos países ya han estado operando en euros durante meses, dado que se vienen utilizando como moneda legal en forma electrónica desde 1999, otros lo van a tener más difícil. Además, los datos históricos también deben ser convertidos, e incluso empresas fuera de la zona del euro que tienen muchas operaciones dentro de ella -el Reino Unido, por ejemplo- deben actualizar los procesos para manejar la nueva moneda.
Facilitar el gran cambio
Todo esto ha puesto a los fabricantes de software ERP a trabajar frenéticamente para facilitar a sus clientes el gran cambio. Así, los programadores han estado preparando las actualizaciones y cajas de herramientas para la conversión de moneda durante varios años. La moneda única ha estado preparándose desde que se realizó el programa europeo para la Unión Económica y Monetaria (UEM) en 1992. Fuentes internas a Oracle, uno de los más conocidos fabricantes de ERPs, han señalado que llevan trabajando internamente en este tema desde hace cuatro años, desde el lanzamiento de la versión del software R11, en 1998. “Desde entonces, aseguran, tenemos una solución viable para ofrecerles”. SAP, por su parte, asegura haber comenzado a trabajar en este tema desde 1996 y señala que sus clientes más importantes como DaimlerChrysler y Siemens ya lo han hecho.
En el caso de J.D. Edwards, la compañía ha llegado incluso a informar a sus clientes por correo certificado de las medidas que debían tomar para migrar sus sistemas al euro. De tal forma, que al menos, no pudieran decir que no estaban notificados ya que desde hace más de un año y medio la funcionalidad del euro se añadió completamente a las actualizaciones normales.
Servicios de consultoría
Los proveedores de ERP ofrecen servicios de consultoría para ayudar a los clientes a realizar fácilmente el cambio, un proceso que puede llevar desde un fin de semana largo a varios meses. Estos servicios de soporte y consultoría son ofrecidos por casi todos los fabricantes tanto “in house” como de forma remota. Finalmente, los expertos también advierten a las empresas no descuidar los recovecos inesperados de su estructura informática en que pueda necesitarse la conversión al euro. Incluso los sistemas periféricos que no sean examinados de cerca -las plantillas electrónicas que se utilizan una vez al año para la planificación financiera, o los documentos de procesamiento de textos que contienen listas de precios- necesitarán conversión. Y no hay que olvidar las aplicaciones de comercio electrónico, por supuesto.
