Empieza la concentración

Una vez que, según apuntan los analistas del mercado, los indicios de que la recuperación del sector está empezando, va haciéndose realidad la máxima de que “una de las consecuencias de las crisis es que los grandes salen reforzados”. Digo esto porque el primer lunes de este mes de junio la compañía PeopleSoft lanzó una OPA contra JD Edwards, y antes de que transcurriesen cinco días el gigante Oracle hizo lo propio contra PeopleSoft. Este escenario de operaciones –propio de los últimos años de los noventa– deja al descubierto, según diferentes analistas, que el segmento del software ha iniciado una carrera hacia la concentración. Tal y como ya sucedió en el mercado del hardware. En estos momentos el software es uno de los mercados con mayor atomización, y la concentración puede ser contemplada como un paso encaminado a la clarificación del mercado. Esto en el lado positivo. En el negativo, se podría llegar a que los diferentes segmentos del software adquieran tal concentración que se podría llegar a una situación “cuasi-monopolística”, lo que supondría una situación de casi total indefensión en el lado del usuario. Centrándonos en la operación abierta por Oracle, sus primeras consecuencias presentarían un escenario en el segmento de las aplicaciones de software empresarial reducido a dos grandes: SAP y Oracle. Pero es que además de en este segmento del software, Oracle disfruta de un liderazgo consolidado en el mercado de las bases de datos, lo que significaría que de llegar a buen bien la adquisición de Peoplesoft, su posición en el segmento del software se incrementaría notablemente. En el horizonte de todo se encuentra ¿cómo no? la compañía liderada por Bill Gates.