EMC Iberia cierra 2003 con un crecimiento del 37%
José Luis Solla, director general de EMC Iberia, achaca a “la fortaleza de visión y ejecución en línea” los resultados obtenidos por la compañía. “La clave de nuestro crecimiento –afirma–, radica en haber sabido atender las necesidades actuales de nuestros clientes, que no son otras que mejorar la eficiencia, y por tanto reducción de costes, minimizar los riesgos y gestionar los niveles de calidad de servicio”. Para lograr su satisfacción, la compañía cuenta con una oferta que Solla resume en dos fases. Una inicial (ANS) formada por consolidación, puesta en red, automatización y estratificación; y una segunda fase con soluciones en torno a la gestión del ciclo de la información (ILM). “Las empresas –señala Solla–, con independencia de su tamaño, son conscientes de que la información es su principal activo y en EMC estamos trabajando por situar al almacenamiento en el centro neurálgico de las infraestructuras TI.
Con respecto a las previsiones del próximo ejercicio, el director general de EMC Iberia espera conseguir un crecimiento mínimo del 25% en 2004, en línea con los objetivos fijados por la Corporación.
De igual forma, Solla asegura que la compañía mantendrá activas dos políticas corporativas ya arraigadas “la inversión anual de 1.000 millones de dólares en I+D, así como la carrera por la adquisición de compañías que puedan complementarla”. A este respecto Solla matizó que serán fundamentalmente “empresas de software”.