"El talento y el liderazgo garantizan el éxito de los proyectos"
Diego Pavía Bardají, director general de Atos Origin para España y Portugal
¿A qué nuevos retos tendrán que hacer frente usuarios y suministradores en el segmento de la consultoría estratégica?
- Como respuesta a la crisis de la que estamos saliendo, seguimos tratando de conseguir una vuelta de tuerca adicional en la mejora de la eficiencia, disminuyendo los costes no productivos y mejorando las economías de escala que da el volumen y las economías de alcance. Esto implica continuar redefiniendo el modelo de gestión para aprovechar al máximo el valor y la capacidad emprendedora de nuestros profesionales, dotándoles de procesos ajustados y de herramientas y metodologías para mejorar el aprovechamiento del conocimiento interno, sin descuidar la inversión en formación y en su desarrollo profesional. El mayor reto que se nos presenta es incorporar los procesos de innovación y retención del talento entre los principales procesos de nuestras compañías, que cada vez serán más necesarios para su supervivencia. Lo más difícil es que todo esto se debe desarrollar dentro de una coyuntura de austeridad y máxima competitividad.
¿Los usuarios entienden la innovación como elemento imprescindible para mantener su competitividad y aumentar la productividad?
- En un entorno tan sumamente globalizado y competitivo, con un abanico tremendo de productos y servicios casi siempre muy parecidos, innovar es crítico y es un factor competitivo clave para la mayoría de las empresas. Ocupar segmentos inexplorados de mercado, añadir valor a productos y servicios existentes, acceder a nuevos canales de distribución, crear nuevos productos y nuevos modelos de negocio, son resultado de la capacidad de innovación de una empresa. Los usuarios buscan, el mejor tiempo de respuesta, eficacia, seguridad y los mejores precios, por lo tanto la innovación tiene que tener como objetivo el crear valor, mantener y aumentar la satisfacción de los usuarios, incluida la satisfacción emocional y, la simplificación. La mayoría de las empresas de éxito tienen asumida la innovación como un factor clave de competitividad a largo plazo, y esto significa innovación estratégica. Las organizaciones deben ver y gestionar la innovación como una parte normal del negocio. Aislar la innovación del negocio convencional puede producir un efecto cultural peligroso para muchas organizaciones.
Outsourcing, deslocalización, externalización, ¿serán las tendencias que dominen el mercado?, ¿qué nuevos modelos de contratación y servicios van a aparecer?
- En este momento en que no se aprecian grandes cambios tecnológicos a la vista, la tendencia es hacia BPO, sumando al outsourcing de sistemas la ejecución del proceso de negocio que soportan para reducir costes y obtener flexibilidad. BTO, en la industria donde el nivel tecnológico es inferior, buscando recuperar posiciones competitivas. Por último, deslocalización selectiva de aquellas actividades más estandarizables.
¿Cree que el talento, así como las capacidades de gestión y de liderazgo, marcarán el futuro?
- Siempre han marcado el camino del éxito de cualquier proyecto empresarial. Todo proyecto necesita que las capacidades de los integrantes del equipo sean movilizadas en pro de la empresa, que cada integrante de ese equipo de lo máximo para lograr el fin de la empresa. Una de las mayores preocupaciones de las compañías en la actualidad es la búsqueda de fórmulas innovadoras para retener a los empleados con más talento, y garantizar la continuidad de la empresa.
¿Debe la Administración Pública jugar un papel destacado en la implantación de las TIC?
- Desde Atos Origin entendemos que el esfuerzo que a día de hoy hace la Administración Pública en el desarrollo de las TIC es notorio. El 80% del I+D de nuestro país lo lidera el Ministerio de Defensa y el Ministerio de Industria lleva dos años liderando, desde las directrices de la UE, planes para el desarrollo de la SI, sin olvidar que el mayor consumidor de tecnología es la Administración. Pero también es verdad que echamos en falta una visión más a medio y largo plazo, que fuera capaz de definir conjuntamente con el tejido industrial del país un plan de inversiones para la industria, con el fin de conseguir para el futuro una estructura industrial sólida que nos permitiera equilibrar nuestra balanza de pagos por lo menos en lo que hace referencia a royalties.