El reto de transformar la información en conocimiento
ERM se perfila como el conjunto de tecnologías ideal para la gestión de RR.HH.
Los Recursos Humanos (RR.HH) se han convertido en el activo más preciado de las empresas, aunque muchas aún no se hayan dado cuenta y su gestión no sea, muchas veces, la más adecuada. Bajo las siglas ERM (Employee Relationship Management) han emergido tecnologías basadas en Internet, que se están perfilando como la solución ideal para ello, al tener capacidad para hacer realidad el principal reto de las compañías del siglo XXI: transformar la información en conocimiento.
Las tecnologías ERM (Employee Relationship Management, gestión de la relación con los empleados, en inglés), que se están perfilando en los últimos tiempos como el arma ideal de las empresas para conseguir que su activo más preciado, los Recursos Humanos (RR.HH.), sean gestionados de la forma más eficiente posible, fue el tema protagonista del Club de Usuarios de Tecnologías de la Información (CUTI). Este encuentro, organizado por el semanario ComputerWorld y la compañía de aplicaciones para recursos humanos Meta4, se celebró el pasado 26 de junio en Madrid, con el objetivo de reunir a los principales agentes de este ámbito y reflexionar sobre los principales retos de la gestión de las relaciones con los empleados y su relevancia de cara a incrementar la eficiencia empresarial.
En el acto, participaron Antonio Romano, vicepresidente de investigación del sur de Europa de la consultora IDC, Pierre Paradis, director corporativo de producto de Meta4, Antonio Fernández, regional manager de Siebel, Jordi Marfany, jefe de Servicios Profesionales de Emplaza, Miguel Ángel Cervera, director de capital humano de Andersen y Enrique Pareja, vicepresidente de acceso de Terra Lycos.
Los RR.HH., un activo clave en las empresas
Si hay un activo que se ha convertido en un elemento clave dentro de las compañías, este es el departamento de Recursos Humanos. Éste, según Romano, “va a desempeñar un papel fundamental en la empresa del siglo XXI, que necesita, para ser eficaz, transformar los datos que alberga en verdadero conocimiento”.
Para ello, aseguró el vicepresidente de investigación del sur de Europa de la consultora de Tecnologías de la Información IDC, “es necesario realizar una inversión considerable en tecnologías y procesos que mejoren la relación de la empresa con los empleados y su gestión”.
En realidad, todo se resume en una necesidad, la de transformar la organización de las empresas para que éstas funcionen en red y que sus empleados se conviertan en ‘trabajadores del conocimiento’, es decir, en individuos que compartan información en tiempo real entre ellos y la empresa donde trabajan y una de las tecnologías que lo posibilita son los portales B2E (Business to Employee) que forman parte del ERM.
Como explicó Romano, la arquitectura de una compañía en lo que se refiere a tecnología, se puede dividir de este modo. En primer lugar, la infraestructura, es decir, el hardware, las redes, los sistemas operativos, etc., en definitiva, lo que permite a las empresas operar las veinticuatro horas del día, todos los días de la semana. En segundo lugar, se encuentran las tecnologías de integración de los sistemas antiguos con los nuevos. Tras ellas están las aplicaciones que permiten gestionar la infraestructura, la gestión de contenidos y la seguridad, seguidas de las aplicaciones verticales como el data warehouse, el business intelligence, etc y, finalmente, las aplicaciones críticas como la gestión de la cadena de suministro, el CRM (gestión de los clientes) y el e-business. “En este sentido se puede asegurar que, por un lado están las aplicaciones críticas para el negocio de una compañía, y, por otro, las tecnologías que permiten dar a la empresa un paso más, transformando los datos en información, y ésta en conocimiento. Éstas son las aplicaciones centradas en el contenido, la gestión de documentos y las aplicaciones de servicios profesionales, las tecnologías ERM”.
ERM: abordar tareas diferentes desde un marco único
Lo que permiten las tecnologías ERM es, según Romano, abordar tareas diferentes desde un único marco. “Y en esto hay que destacar tres niveles diferentes, las aplicaciones de recursos humanos, los procesos de las empresas y, finalmente, los procesos administrativos. La clave de todo ello es que la empresa, para gestionar este marco, elija las aplicaciones más adecuadas”.
Un elemento importante es que las aplicaciones ERM puedan compartir datos entre sí y con las demás. Una de estas tecnologías es el portal del empleado, el B2E (Business to Employee). “Innovación, precisión, integración e interacción son los cuatro pilares que deben soportar este tipo de portales”. Éstos tienen la capacidad de integrar datos internos y externos, otorgan grandes posibilidades de personalización a los empleados que los utilizan y les permiten integrar amplios contenidos que luego transforman en conocimiento. Además, puntualizó Romano, “deben ser eficientes y, sobre todo, seguros”.
Según el responsable de IDC, el B2E ser´´a tan impotante en un futuro que de aquí a cinco años será obligatorio para las empresas contar con un portal del empleado. De hecho, los datos de la consultora apuntan a un crecimiento de un 7,2% de este mercado desde el año 2001 al año 2004. “El mercado de gestión de contenidos para portales de empresa está creciendo un 80% en el sur de Europa. Además, las aplicaciones de contenidos crecerán un 29,8%, así como sectores como la seguridad, la autenticación (básica para que los empleados accedan de forma segura a sus portales personalizados) y los Web Services o Servicios Web, que permitirán la integración de las aplicaciones”.
Invertir antes de que lo haga la competencia
Además de ser conscientes del rol fundamental de los recursos humanos en la empresa y de las nuevas tecnologías que están surgiendo para gestionarlos, es fundamental invertir en estas tecnologías antes que la competencia. Así lo ve Romano y también Paradis, que aseguró que el mayor problema de ello es que “todavía las empresas no ven a los empleados como un valor esencial sino como un coste, un gasto para ellas. Hay que apostar por las personas y destinar más presupuesto para gestionarlas. Pero primero para hacer esto posible, hay que cambiar la cultura del empresario. El trabajo debe ser flexible y el empleado tiene que tener tiempo para desarrollar su profesión. En el futuro, cada vez estará más mezclada la vida laboral con la personal”.
El director corporativo de producto de Meta4 explicó cómo está cambiando el entorno laboral de hoy en día, “vamos hacia la cultura del ‘do it yourself’ (hágalo usted mismo) y al entorno de trabajo ERM. Esto se refleja en que cada vez hay menos personas que trabajen en fábricas y más que lo hagan en el sector servicios, en concreto, en EE.UU. ya hay un 80% que trabaja en este último sector mientras sólo un 20% trabaja en el primero. “Este cambio tendrá un gran impacto porque significa que el componente intelectual es cada vez más importante en los trabajadores”.
Además, según Paradis, a esta tendencia hay que unir que cada vez es más necesario interactuar de forma imprevista e inmediata y saber reaccionar a tiempo. “Y este componente intelectual
Las tecnologías ERM (Employee Relationship Management, gestión de la relación con los empleados, en inglés), que se están perfilando en los últimos tiempos como el arma ideal de las empresas para conseguir que su activo más preciado, los Recursos Humanos (RR.HH.), sean gestionados de la forma más eficiente posible, fue el tema protagonista del Club de Usuarios de Tecnologías de la Información (CUTI). Este encuentro, organizado por el semanario ComputerWorld y la compañía de aplicaciones para recursos humanos Meta4, se celebró el pasado 26 de junio en Madrid, con el objetivo de reunir a los principales agentes de este ámbito y reflexionar sobre los principales retos de la gestión de las relaciones con los empleados y su relevancia de cara a incrementar la eficiencia empresarial.
En el acto, participaron Antonio Romano, vicepresidente de investigación del sur de Europa de la consultora IDC, Pierre Paradis, director corporativo de producto de Meta4, Antonio Fernández, regional manager de Siebel, Jordi Marfany, jefe de Servicios Profesionales de Emplaza, Miguel Ángel Cervera, director de capital humano de Andersen y Enrique Pareja, vicepresidente de acceso de Terra Lycos.
Los RR.HH., un activo clave en las empresas
Si hay un activo que se ha convertido en un elemento clave dentro de las compañías, este es el departamento de Recursos Humanos. Éste, según Romano, “va a desempeñar un papel fundamental en la empresa del siglo XXI, que necesita, para ser eficaz, transformar los datos que alberga en verdadero conocimiento”.
Para ello, aseguró el vicepresidente de investigación del sur de Europa de la consultora de Tecnologías de la Información IDC, “es necesario realizar una inversión considerable en tecnologías y procesos que mejoren la relación de la empresa con los empleados y su gestión”.
En realidad, todo se resume en una necesidad, la de transformar la organización de las empresas para que éstas funcionen en red y que sus empleados se conviertan en ‘trabajadores del conocimiento’, es decir, en individuos que compartan información en tiempo real entre ellos y la empresa donde trabajan y una de las tecnologías que lo posibilita son los portales B2E (Business to Employee) que forman parte del ERM.
Como explicó Romano, la arquitectura de una compañía en lo que se refiere a tecnología, se puede dividir de este modo. En primer lugar, la infraestructura, es decir, el hardware, las redes, los sistemas operativos, etc., en definitiva, lo que permite a las empresas operar las veinticuatro horas del día, todos los días de la semana. En segundo lugar, se encuentran las tecnologías de integración de los sistemas antiguos con los nuevos. Tras ellas están las aplicaciones que permiten gestionar la infraestructura, la gestión de contenidos y la seguridad, seguidas de las aplicaciones verticales como el data warehouse, el business intelligence, etc y, finalmente, las aplicaciones críticas como la gestión de la cadena de suministro, el CRM (gestión de los clientes) y el e-business. “En este sentido se puede asegurar que, por un lado están las aplicaciones críticas para el negocio de una compañía, y, por otro, las tecnologías que permiten dar a la empresa un paso más, transformando los datos en información, y ésta en conocimiento. Éstas son las aplicaciones centradas en el contenido, la gestión de documentos y las aplicaciones de servicios profesionales, las tecnologías ERM”.
ERM: abordar tareas diferentes desde un marco único
Lo que permiten las tecnologías ERM es, según Romano, abordar tareas diferentes desde un único marco. “Y en esto hay que destacar tres niveles diferentes, las aplicaciones de recursos humanos, los procesos de las empresas y, finalmente, los procesos administrativos. La clave de todo ello es que la empresa, para gestionar este marco, elija las aplicaciones más adecuadas”.
Un elemento importante es que las aplicaciones ERM puedan compartir datos entre sí y con las demás. Una de estas tecnologías es el portal del empleado, el B2E (Business to Employee). “Innovación, precisión, integración e interacción son los cuatro pilares que deben soportar este tipo de portales”. Éstos tienen la capacidad de integrar datos internos y externos, otorgan grandes posibilidades de personalización a los empleados que los utilizan y les permiten integrar amplios contenidos que luego transforman en conocimiento. Además, puntualizó Romano, “deben ser eficientes y, sobre todo, seguros”.
Según el responsable de IDC, el B2E ser´´a tan impotante en un futuro que de aquí a cinco años será obligatorio para las empresas contar con un portal del empleado. De hecho, los datos de la consultora apuntan a un crecimiento de un 7,2% de este mercado desde el año 2001 al año 2004. “El mercado de gestión de contenidos para portales de empresa está creciendo un 80% en el sur de Europa. Además, las aplicaciones de contenidos crecerán un 29,8%, así como sectores como la seguridad, la autenticación (básica para que los empleados accedan de forma segura a sus portales personalizados) y los Web Services o Servicios Web, que permitirán la integración de las aplicaciones”.
Invertir antes de que lo haga la competencia
Además de ser conscientes del rol fundamental de los recursos humanos en la empresa y de las nuevas tecnologías que están surgiendo para gestionarlos, es fundamental invertir en estas tecnologías antes que la competencia. Así lo ve Romano y también Paradis, que aseguró que el mayor problema de ello es que “todavía las empresas no ven a los empleados como un valor esencial sino como un coste, un gasto para ellas. Hay que apostar por las personas y destinar más presupuesto para gestionarlas. Pero primero para hacer esto posible, hay que cambiar la cultura del empresario. El trabajo debe ser flexible y el empleado tiene que tener tiempo para desarrollar su profesión. En el futuro, cada vez estará más mezclada la vida laboral con la personal”.
El director corporativo de producto de Meta4 explicó cómo está cambiando el entorno laboral de hoy en día, “vamos hacia la cultura del ‘do it yourself’ (hágalo usted mismo) y al entorno de trabajo ERM. Esto se refleja en que cada vez hay menos personas que trabajen en fábricas y más que lo hagan en el sector servicios, en concreto, en EE.UU. ya hay un 80% que trabaja en este último sector mientras sólo un 20% trabaja en el primero. “Este cambio tendrá un gran impacto porque significa que el componente intelectual es cada vez más importante en los trabajadores”.
Además, según Paradis, a esta tendencia hay que unir que cada vez es más necesario interactuar de forma imprevista e inmediata y saber reaccionar a tiempo. “Y este componente intelectual
