El nuevo director general de Intel da las claves del giro estratégico de la compañía

- Intel se encuentra en un momento dulce. Su tercer trimestre se ha cerrado con unos ingresos de 11.100 millones de dólares, lo que supone un crecimiento del 18% respecto al mismo periodo de 2010. El beneficio también ha crecido un 59% hasta 2.960 millones. ¿Estamos saliendo ya de la crisis?

Es curioso que en un año como éste, en el que la situación macroeconómica es complicada, las tecnológicas, o al menos muchas de ellas, sigan rompiendo sus resultados. Es el caso de Intel, cuyos tres primeros trimestres han sido récord por distintas razones. Esta tendencia del mercado de comprar tecnología aun en época de crisis, significa que las personas han cambiado la forma de hacer las cosas y que están dispuestas a sacrificar la compra de otros productos y servicios (ropa, entretenimiento, viajes) pero no de la tecnología. Aunque también es cierto que en Estados Unidos y en Europa Occidental las ventas en el sector de consumo no han sido tan buenas como en los países emergentes. En lo que respecta al sector empresarial, también estamos viendo más movimiento. Por la tendencia habitual del mercado 2008 debería haber sido un año de renovación de equipos, pero la crisis lo frenó y se retrasaron muchas decisiones de compra. Decisiones que se están activando ahora porque, ya en 2010, las empresas no pueden aguantar sin renovar equipos. Se están comprando bastante más que el año pasado. Por otro lado, otro dato positivo es que este año se está manteniendo el precio medio de los equipos, rompiendo la tendencia de disminución del precio deventa de PC y, por tanto, de procesadores. Eso significa que se ha llegado a una situación en la que el precio de los dispositivos ya es bastante asequible. Además, la aparición de los netbooks, una opción más barata de equipos, ha facilitado que muchas personas con menos capacidad de compra, adquieran tecnología. Finalmente, hay que destacar que Intel tiene una cartera de productos muy fuerte, lo que ha influido en nuestros buenos resultados, Intel Core (i3, i5, i7) ha sido muy bien recibido en el mercado, la gente está dispuesta a pagar por estos equipos. España es uno de los países que lidera la adopción de las últimas tecnologías y, en particular, es uno de los que mejor acepta Core.

- Llegados a este punto, ¿qué perspectivas tienen para su último trimestre tanto a escala global como en España?

Esperamos llegar a los 43.600 millones de dólares, lo que supone un crecimiento de un 24% respecto al mismo periodo del año pasado. Sería una cifra récord absoluto y un 18% mejor que la de 2008 y un 24% mejor que la de 2009. En cuanto a España, deberíamos crecer un 15%. Los analistas (IDC) estiman que el mercado de PC crecerá un 24%. Nuestras estimaciones son de un 18% porque en el tercer trimestre parece haberse frenado algo el consumo y tanto el sector empresarial como, sobre todo, la Administración Pública, están muy parados.

- ¿Y cuál es su estrategia a seguir en nuestro país?

En España el sector consumo funciona muy bien. Estamos siendo capaces de que los distribuidores transmitan valor a los usuarios finales y nuestra idea es seguir impulsando este ámbito. También lo es impulsar el segmento empresarial. En materia de Administración Pública, aunque las inversiones se han paralizado, está funcionando muy bien el área de educación con el proyecto Escuela 2.0. Este proyecto ya está en marcha en todas las comunidades autónomas excepto en Madrid y Valencia que aún no se han acogido a este programa. Por otro lado, también fomentaremos el área de nuevos negocios. De hecho, un 25% de la inversión en I+D de Intel se centra en estas áreas. Por ejemplo, queremos generar 1.000 millones de dólares asociados a los sistemas embebidos, lo que abarca automóviles, aerogeneradores, equipamiento de defensa, retail, puntos de venta, banca… Hay muchos segmentos con dispositivos susceptibles de computar y adonde estamos dirigiéndonos. Éste es el resultado de la compra de Wind River, realizada el año pasado, que tiene sistemas operativos y servicios dirigidos a sistemas embebidos. Por desgracia en España no hay demasiadas empresas que diseñen y fabriquen en este entorno, pero a escala global hemos ganado un contrato con Mercedes y BMW, que tienen sus sedes en Alemania, y trabajamos con Peugeot y Renault en Francia. Lo que sí hay en España son empresas que diseñan aquí y fabrican fuera. Por ejemplo, estamos trabajando en el entorno de set top boxes o televisión híbrida. Queremos integrar el mundo de Internet y de la televisión de forma transparente para el usuario. La televisión híbrida es una realidad y allí tenemos mucho hecho. Desde que Google presentó Google TV en mayo se ha trabajado mucho en esta área. Para este último trimestre del año tanto Sony como Logitech van a presentar televisores y seto top boxes basadas en Google TVcon Atom. Sin duda, Intel está diversificando su apuesta.

- Wind River les está abriendo un nuevo mundo, pero otro movimiento que ha impactado a la industria y que se ha realizado cuando asumió su nuevo rol en la empresa es la compra de la compañía de seguridad McAfee. Y también hay que mencionar la evolución de Intel hacia el mundo de los smartphones de mano de otras compras...

Sí, entrar en el mercado de los smartphones es una apuesta estratégica de Intel. El anuncio más relevante que hicimos este año fue el respaldo conjunto de Meego junto a Nokia en el Mobile World Congress. Ahora nos encontramos en el momento de crear el ecosistema completo que nos permita materializar este proyecto. Ya no vale con tener el mejor procesador, el mejor hardware y el mejor sistema operativo, sino que hay que desarrollar la mejor interfaz de usuario, una serie de aplicaciones, homologar estos productos… El ciclo de diseño de un producto de smartphone es mucho más largo que el del entorno de PC. Así que nos hemos dado cuenta de que tenemos que dejar de ser una compañía sólo de chips a ser una empresa mucho más completa. Por eso hemos realizado las compras de McAfee, de Infineon Wireless y de una parte de cable de Texas Instrument. La compra