El CRM en España
Resulta muy coherente que, desde la filial española de IDC se destaque que, en el 45 por ciento de los casos, es la dirección general quien impulsa los desarrollos CRM. Porque, desde esa posición, se puede tener una clara perspectiva de los comportamientos del cliente en su praxis compradora, en la orientación de su demanda, y en sus reacciones y fugas, y los máximos responsables de las compañías con carácter emprendedor e innovador se ven empujados a cambios de estrategia con condicionantes de reestructuraciones y rediseños que permitan, incluso, adquirir posiciones de dominio respecto a sus competidores.
Las compañías distribuidoras de soluciones CRM son conscientes de que su gestión se ve muy favorecida por el convencimiento de que, en grandes cuentas con gran número de clientes, la adopción del one-to-one como práctica idónea de marketing para satisfacerlos, es la fórmula magistral para intentar fidelizarlos. Por lo tanto, gestionar con talento la base de clientes resulta primordial para la consecución de buenas cuentas de resultados. Concienciar de ello a las direcciones generales no debería resultar demasiado complicado. En esta línea, el Director de Sistemas de Información también puede tener la oportunidad de introducir cambios sustanciales en su SI, alegando un mejor y mayor aprovechamiento de la solución CRM que se contrate. Cuestión de oportunidad.