El almacenamiento como servicio externo
Un nuevo modelo de servicio
En la actualidad, resulta posible crear -y, de hecho, muchos proveedores de almacenamiento los están sacando al mercado- conjuntos de soluciones de almacenamiento que combinan hardware y software. Estos conjuntos de soluciones están dirigidos a resolver los problemas empresariales. También están empezando a aparecer los conjuntos de soluciones de almacenamiento diseñados específicamente para aplicaciones de servicio de Internet.
El modelo de servicio lleva el almacenamiento más allá del hardware puramente físico a un ámbito más abstracto. La analogía que normalmente se utiliza es la de un servicio de suministro eléctrico. Entidades diversas, desde sitios web a centros de datos empresariales, enchufan las aplicaciones en la utilidad de almacenamiento, lo mismo que los consumidores de electricidad enchufan los electrodomésticos en los enchufes de la pared. Los usuarios de la utilidad de almacenamiento pagan por la capacidad de almacenamiento que van consumiendo.
Como consumidores de electricidad, damos por sentado que cuando enchufamos el tostador obtenemos tostadas, a cualquier hora del día o de la noche. En la analogía del almacenamiento, la utilidad garantiza una disponibilidad 24 x 7 de una capacidad virtualmente ilimitada, así como el cumplimiento de otros requisitos del servicio como son el rendimiento y la seguridad de los datos. Sin embargo, a diferencia de una compañía de suministro eléctrico, el espacio real de la utilidad de almacenamiento puede estar en cualquiera de estos tres lugares: un centro de datos empresarial, un sitio de Internet o de proveedor de servicios de aplicaciones (ASP, Application Service Provider) o un espacio dedicado al almacenamiento en la red corporativa, con servicios distribuidos.
Los tres elementos fundamentales necesarios para el funcionamiento del modelo de servicio de almacenamiento son Infraestructuras comprobadas y completamente integradas, software de supervisión y capital. El primero incluye los conjuntos de discos, los componentes de interconexión y la gestión. La infraestructura permite la ampliabilidad y la reconfiguración sin trastornos en el servicio. Las interconexiones de la red también proporcionan las vías por las que el software de gestión supervisa el uso y el rendimiento, y controla las operaciones.
Por su parte, el software de supervisión consiste en que el proveedor del servicio supervisa el consumo de capacidad por parte del cliente para generar las facturas basadas en la utilización y garantiza que se mantiene el nivel del servicio. El cliente también puede tener acceso a un subconjunto de estas funciones de supervisión para validar los costes del servicio, basados en un acuerdo sobre el nivel del servicio.
Por último, el capital es necesario en un modelo de pago según el consumo requiere que alguien que no sea el cliente ponga los bienes y el personal. Por lo tanto, la creación de utilidades de almacenamiento necesita una inversión considerable en infraestructura, desarrollo de software y personal.
Durante años, el conjunto de discos ha sido el centro del universo del almacenamiento. Alrededor de él, los proveedores han envuelto software y servicios para añadir valor, intentando elevar al conjunto de discos a un precio muy por encima de su categoría de artículo de consumo. Sin embargo, el software de gestión del almacenamiento abierto que da soporte a una mezcla heterogénea de subsistemas y conjuntos de almacenamiento ha surgido ahora como un segmento independiente de crecimiento rápido en la industria del almacenamiento, originado por la necesidad de gestionar el crecimiento enorme de al información y su complejidad. Como consecuencia, les resultará cada vez más difícil a los proveedores de conjuntos de dispositivos, tanto independientes como relacionados con sistemas, mantener el control sobre el software como un factor de valor añadido.
La buena noticia para los proveedores de este tipo de dispositivos es que la venta de almacenamiento como servicio distribuido por medio de la Red mete al conjunto en un marco estricto y global de componentes y software de gestión: la infraestructura de almacenamiento. Y ahora mismo existe una demanda casi insaciable de soluciones de infraestructura de almacenamiento basado en la Red. Sin embargo, si tanto los usuarios de las empresas puntocom como los de las establecidas empiezan a mostrar preferencia por comprar el almacenamiento como un servicio, más que como una solución, se abrirá la puerta para que otras compañías entren en el mercado SSP (Storage Services Provider). Los SSP competirán entonces sobre la base del coste por megabyte con los jugadores de la infraestructura pura, haciendo que la infraestructura sea en mayor medida un artículo de consumo y presionando más a la baja el coste global del almacenamiento. Retrospectivamente, la conversión en artículos de consumo de los servicios y productos en la Red ha llevado los niveles de precios a cero.
¿Quiere esto decir que los SSP están a punto de liberarse de las presiones para la fijación de los precios? De ninguna manera. De hecho, los SSP pueden estar en una posición todavía más precaria de la que estaban. Consideremos el caso de un cliente que es un director de TI cuyo mayor quebradero de cabeza sea el correo electrónico interno. Su empresa tiene la fortuna de estar disfrutando del éxito, pero el quebradero de cabeza del ejecutivo surge de tener que ampliar el entorno de almacenamiento para dar soporte al sistema de correo electrónico. Cada vez que el sistema crece, aparecen problemas de rendimiento. Por lo que el director de TI decide externalizar el quebradero de cabeza del correo electrónico a un proveedor de servicios basado en la Red. Al ejecutivo le surge una pregunta cuando llega el momento de evaluar los precios: ¿es el nuevo proveedor del servicio de correo electrónico un ASP o un SSP? El proveedor de servicio basado en la Red está solucionando lo que es esencialmente un problema de almacenamiento; sin embargo, en este caso consideraríamos al destinatario de la externalización como un ASP más que como un SSP, y si el ejecutivo de TI hace lo mismo, demandará determinadas estructuras de precios y acuerdos de nivel de servicio que no reflejarán los costes en términos de almacenamiento del proveedor del servicio. El dilema para los jugadores en el grupo de los SSP será basar sus posiciones diferenciadas de cara al mercado en su capacidad para resolver problemas empresariales específicos, tales como el que acabamos de comentar. Para hacerlo, algunos desplazarán sus posiciones en la dirección de los ASP y se enfrentarán a una fuerte competencia por parte de los jugadores ya establecidos, mientras que otros continuarán ofreciéndose como SSP y exponiéndose así a las presiones para la fijación de precios como artículo de consumo.
Finalmente, Internet continuará infl