El ahorro en pruebas, una práctica peligrosa
Los retrasos en las entregas de proyectos, incrementados por la crisis económica, provocan en la mayoría de los casos que no se realicen las pruebas pertinentes para asegurar la calidad del software en nuestro país.
La Asociación de Técnicos de Informática (ATI) ha presentado los resultados de un estudio que determina cuáles son las características de calidad más importantes para los profesionales de TI en España en la evaluación del software de seguridad informática, basado en encuestas realizadas a más de 200 expertos de los más diversos sectores.
Entre las principales conclusiones se destaca que el 94,48% otorga una gran importancia a la calidad del software, afirmando que asumiría un coste extra en su adquisición a cambio de una mayor calidad, especialmente en su funcionalidad, fiabilidad, eficiencia y facilidad de mantenimiento.
“Los responsables de TI no consideran prioritaria la apariencia, aunque sí lo sea para muchos fabricantes, en comparación con la eficiencia en el consumo de capacidades de proceso, recursos energéticos o que sea limitada la interferencia con otros programas”, afirma Luis Fernández, coordinador del grupo de calidad del software de ATI.
Asimismo, los profesionales de las TIC consideran que los productos de seguridad deben acompañarse de una documentación mucho más amplia y detallada, que facilite la recuperación de los programas en caso de cualquier tipo de desastre informático.
Los CIO también consideran importantes, en sus procesos de selección de productos, la cuota de mercado de cada fabricante, su reputación, solvencia, experiencia y la autonomía de los proveedores o fabricantes de software.
La llegada de la crisis, con la consiguiente paralización de muchos proyectos por falta de financiación, ha hecho que la eliminación o la reducción del tiempo dedicado a las pruebas de software se convierta en una práctica más que habitual en las empresas desarrolladoras, con el fin de reducir costes.
En el estudio se refleja que más del 90% de los profesionales de las TIC afirman que sus empresas recurren a esta práctica cuando surgen retrasos o problemas financieros. A este dato se suma otro de gran importancia: más del 50% de los encuestados siguen careciendo de formación específica en pruebas de software, una técnica esencial para la calidad de las aplicaciones empleadas en todos los proyectos.