El 7,2% de las empresas con más de 200 trabajadores utilizan el e-learning

El 33% de las empresas han pasado de experiencias piloto a integrarlo en sus planes de formación

La Asociación de Proveedores de e-learning, APeL y la consultora Inmark para la Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo han presentado el estudio Diagnóstico prospectivo y pautas de desarrollo donde se ha puesto de manifiesto que las empresas serán más proclives en el futuro a implementar servicios de formación vía Internet.
Sin embargo, no todo son luces. Si bien es cierto que más del 7% de empresas con más de 200 trabajadores emplean la fórmula del e-learning, las pymes se quedan en sólo un 0,2%; aunque cerca del 67% de los actuales usuarios se muestran muy satisfechos con las experiencias vividas. Una de las razones esgrimidas es que se ha realizado el 20% de las horas de formación totales mediante e-learning dedicando el 16% del presupuesto.
La madurez del e-learning se percibe cada vez más en nuestro país, donde más del 33% de las empresas indican que han pasado de las experiencias piloto a integrarlo en sus planes de formación, mientras que un 24% considera que el e-learning está totalmente integrado en su organización. Según se pone de manifiesto en el estudio, esta tendencia parece que se mantendrá, puesto que las previsiones de asignación presupuestaria al e-learning de las empresas aumentará en el 56% de los encuestados, mientras que sólo un 4% piensa que reducirá sus inversiones en teleformación.
Asimismo se percibe una tendencia en la maduración de la oferta, que dará paso a proveedores más grandes o especializados y concentrados en la generación de contenidos de valor para el negocio de los clientes.

Factores claves
El estudio refleja varios factores claves para que aumente la penetración del e-learning en España como son los tecnológicos, acercando las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) a la empresa; mejorar la cultura informática y formativa en la empresa, tanto a nivel de directivos como de empleados; convertir a la formación en un activo estratégico de las empresas en lugar de un gasto; fomentar el asociacionismo vertical y multisectorial para acercar la formación a las pymes; eliminando las barreras de gestión y coordinación de la formación, tan compleja para las pequeñas empresas.
En este sentido, los autores del estudio destacaron especialmente el papel de las administraciones regionales como el verdadero motor de la e-formación, tanto por su potenciación interna para formar a su propio personal como por la ayuda a su implantación en la empresa, al tratarse de un importante factor en la mejora de la competitividad.
Bajo estas premisa, los autores del informe han aprovechado el mismo para señalar a la Administración como el principal líder para la generación de normas, indicadores de calidad, cualificaciones profesionales. Además, su intermediación no hará sino beneficiar la implantación de un sistema de regulación necesaria, que deberá estar apoyada en las Asociaciones que forman el sector.

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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