De La Rue irrumpe en el mercado de cajeros automáticos
Espera conseguir el 25% de las ventas en 2007
De La Rue, una de las grandes compañías de automatización de efectivo del mundo, ha estado siempre en este mercado pero como proveedor de componentes. Con la adquisición de la portuguesa Papelaco en 2002, la compañía perfila su estrategia para introducirse en el mundo del autoservicio. En España, el objetivo es situarse entre los tres primeros puestos de proveedores de cajeros, con un 10% de las ventas de este mercado para 2003, estimado en 5.000 unidades/año, y un 25% en 2007, cuya previsión es de alrededor de 6.000 unidades/año. Según Juan Carlos García, responsable de Marketing de Autoservicios, “hemos dado este paso como una evolución natural que completa nuestra oferta en el tratamiento del efectivo y con el que nos convertimos en el único proveedor global para soluciones en todo el ciclo”.
Denominada Cash Star, la nueva oferta de autoservicios se ajusta a las recomendaciones del Banco Central Europeo orientadas a detectar el fraude de efectivos. La presentación oficial de esta nueva línea tendrá lugar durante la celebración de CeBit 2003.
Germán Díaz Poveda, director general de De La Rue en España, está convencido de la convivencia entre automatización bancaria y tratamiento directo de las sucursales. “La clave del éxito –asegura–, está en la integración de los distintos canales de venta bancarios, priorizando aquellos que favorecen la fidelización de los clientes y la creación de nuevos negocios. Nuestro compromiso con las entidades bancarias se extiende a suministrarles una oferta global y completa del manejo de efectivo que ayude a liberar recursos mediante la automatización permitiendo una mayor dedicación a la venta de productos financieros con el menor coste posible”.
De La Rue corresponde la autoría del primer cajero automático desarrollado en 1969 en colaboración con Barclays Bank. Actualmente, uno de cada cinco cajeros automáticos instalados en el mundo incorporan dispensadores De La Rue.