CTC adquiere la compañía Flexiline
La compañía CTC Servicios Integrales, especializada en servicios de outsourcing industrial y logístico, se ha introducido en el segmento de los servicios de outsourcing informático con la compra de la empresa Flexiline, especializada en la fabricación de ordenadores, servidores de gama alta y la prestación de servicios.
Con esta adquisición, CTC se posiciona en el mercado español para competir en servicios de outsourcing de TI, un mercado que según la compañía ha facturado 126.000 millones de pesetas a nivel nacional en el último año y, desde 1998, ha registrado un crecimiento anual del 30%.
Así lo explicaba José Martínez, consejero delegado de CTC, al señalar que “la adquisición de Flexiline es un paso vital dentro de nuestra campaña de posicionamiento como líderes de servicios de externalización en España. Esta adquisición nos permite tomar una posición muy aventajada en el mercado español y para ello nos apoyamos en una compañía con un alto nivel de conocimiento de estos mercados y clientes”.
La operación, formalizada en los últimos dos meses, se ha realizado a través de un intercambio de acciones entre ambas compañías junto con una prima de unos 40 millones de pesetas. Como resultado, CTC pasa a controlar un 80% de las acciones del Flexiline, una compañía que fabrica 120.000 ordenadores al año en las instalaciones que posee en la localidad de Cerdanyola del Vallès, con una superficie de 1.500 metros cuadrados donde se ubican los servicios centrales y las diferentes áreas que conforman el proceso de fabricación: I+D, ensamblaje, test, verificación, control de calidad, RMA y expediciones.
“La adquisición de las instalaciones, todo el personal y el activo de negocio de Flexiline, permitirá a CTC consolidar su liderazgo en el sector del outsourcing y llegar a una facturación cercana a los 6.000 millones de pesetas y a una plantilla de 900 personas cuando finalice el actual año fiscal”, explicó el director general de CTC, Joan Carrillo.
De esta forma, la compañía, que ofrece sus servicios en sectores como automoción, electrónica, alimentación, química, electricidad, hostelería, metalúrgia, téxtil, y transportes en España, Brasil, China, Uruguay y México, espera alcanzar una facturación de entre 5.500 y 6.000 millones de pesetas en el outsourcing de servicios informáticos, con una plantilla de trabajadores que alcanza los 850 empleados.
Con esta adquisición, CTC se posiciona en el mercado español para competir en servicios de outsourcing de TI, un mercado que según la compañía ha facturado 126.000 millones de pesetas a nivel nacional en el último año y, desde 1998, ha registrado un crecimiento anual del 30%.
Así lo explicaba José Martínez, consejero delegado de CTC, al señalar que “la adquisición de Flexiline es un paso vital dentro de nuestra campaña de posicionamiento como líderes de servicios de externalización en España. Esta adquisición nos permite tomar una posición muy aventajada en el mercado español y para ello nos apoyamos en una compañía con un alto nivel de conocimiento de estos mercados y clientes”.
La operación, formalizada en los últimos dos meses, se ha realizado a través de un intercambio de acciones entre ambas compañías junto con una prima de unos 40 millones de pesetas. Como resultado, CTC pasa a controlar un 80% de las acciones del Flexiline, una compañía que fabrica 120.000 ordenadores al año en las instalaciones que posee en la localidad de Cerdanyola del Vallès, con una superficie de 1.500 metros cuadrados donde se ubican los servicios centrales y las diferentes áreas que conforman el proceso de fabricación: I+D, ensamblaje, test, verificación, control de calidad, RMA y expediciones.
“La adquisición de las instalaciones, todo el personal y el activo de negocio de Flexiline, permitirá a CTC consolidar su liderazgo en el sector del outsourcing y llegar a una facturación cercana a los 6.000 millones de pesetas y a una plantilla de 900 personas cuando finalice el actual año fiscal”, explicó el director general de CTC, Joan Carrillo.
De esta forma, la compañía, que ofrece sus servicios en sectores como automoción, electrónica, alimentación, química, electricidad, hostelería, metalúrgia, téxtil, y transportes en España, Brasil, China, Uruguay y México, espera alcanzar una facturación de entre 5.500 y 6.000 millones de pesetas en el outsourcing de servicios informáticos, con una plantilla de trabajadores que alcanza los 850 empleados.
