Con sentido
La primera reacción tras conocer la imprevisible noticia de que Sun Microsystems se había hecho con el control de StorageTek fue una absoluta sorpresa. Nadie, ni el más avezado de los analistas había previsto un movimiento en la compañía de McNeally de estas características. Lo segundo que se produjo fueron los comentarios: dispares y diversos la gran mayoría de ellos. Y es que Sun después de haber sido la compañía reina en el entorno Unix con su Solaris era la primera y gran víctima del fenómeno Linux, algo que tardó algún tiempo en asimilar, puesto que con el objetivo de seguir las tendencias del mercado llegó a sacrificar su buque insignia. Aún así, hay que ser realistas y, a lo largo de su trayectoria, Sun ha demostrado ser una compañía con un gran potencial tecnológico que ha redundado en un claro beneficio para la sociedad, y ahí está Java. Pero este mercado es duro y su vertiginosa evolución no permite ni un solo traspiés. Por ello, Sun necesitaba volver a demostrar ese potencial, articulando un mensaje de futuro para lo cual era absolutamente obligatorio dar un giro a su estrategia que le permitiese situarse en ese grupo de cabecera en el mercado TI y eso precisamente es lo que ha hecho. Comprar STK implica que Sun entra de lleno en uno de los segmentos con mayor potencial de crecimiento: el almacenamiento. Hasta ahora Sun operaba en este mercado pero actuaba simplemente de OEM de Hitachi, no podía imprimir su impronta a este segmento. En cambio ahora con esta inteligente adquisición, Sun, ha sido capaz además de superar los múltiples comentarios que cuestionaban su propia viabilidad como compañía. Cierto es que asume un riesgo al abordar un mercado en el que hay compañías con claros liderazgos como EMC, Hitachi, IBM, HP... pero este mercado es para aquellos que creen en algo, apuestan y arriesgan.
