Completar la Revolución de la Información
El futuro de la Tecnología
Los beneficios y las promesas de la Revolución de la Información no se harán realidad hasta que dejemos de pensar que estamos aún en la Revolución Industrial, afirma Michael L. Dertouzos, el que fuera director del Laboratorio de Ciencias Informáticas del Massachusetts Institute of Technology (MIT) hasta su reciente fallecimiento. Después de 40 años de fabricar ordenadores, pocas cosas han cambiado: el futuro de los ordenadores está en hacer que “los sistemas sirvan a los seres humanos”, asegura Dertouzos en esta entrevista que la edición americana de ComputerWorld publicó poco después de su muerte.
Usted habla de una informática centrada en el hombre, en la que el ordenador no es simplemente un dispositivo, sino toda una “habitación” en la que el proceso electrónico está en torno a uno y se siente en el aire. ¿En qué forma difiere esto de una informática de amplia difusión, ubicua y generalizada?
- Hay mucha confusión entre una informática generalizada y de uso corriente por un lado y una informática centrada en el hombre, por el otro. No son la misma cosa. El proceso de datos de propósito general implica una gran cantidad de equipos, con el énfasis en una importante cantidad de dispositivos, que son en sí mismos ordenadores. La informática centrada en el hombre, por el contrario, dirige su atención, precisamente, a los seres humanos. Hoy, los ordenadores resultan difíciles de utilizar. Y si aumentamos su difusión y utilizamos una mayor cantidad de ellos, las cosas se agravarán bastante más entre nosotros. Acentuando el énfasis en unos sistemas centrados en el hombre, estamos declarando que nuestro objetivo es servir al hombre. Que ello requiera más o menos equipos es secundario.
En ese modelo de proceso electrónico de datos que usted describe, la interacción estará activada por la voz. ¿Por qué?
- Gran parte de ello requerirá reconocimiento de voz, y no sólo activación por la voz. Hablar es natural para las personas, y por lo tanto la voz es fácil de utilizar. Es por esto que los sistemas centrados en el hombre deben tener capacidad de voz. Hay que recordar que el factor fundamental que diferenciará a los sistemas centrados en el hombre es que los ordenadores estarán a su servicio. No les importará cómo uno se comunica ni cuál es la forma más cómoda para uno. Paradójicamente, la informática seguirá un modelo antiguo, incómodo para los seres humanos pero perfecto para las máquinas: el modelo con múltiples siervos o criados “no inteligentes”. El software que servirá al hombre no adoptará una forma humana, como un robot, ni tendrá un rostro indefinible y grandes orejas. Consistirá simplemente en programas instalados allí, haciendo las cosas que uno quiera que hagan.
La informática de gran difusión se está convirtiendo en un hecho: Con teléfonos móviles, ordenadores portátiles y dispositivos manuales, podemos trabajar prácticamente en cualquier lugar. ¿Cuánto tardará en llegar la transformación que nos permitirá hacer esto y más, simplemente hablando a esa habitación en la que la informática está en torno a uno y en el aire?
- La informática generalizada y de amplia difusión es fácil. Es lo que ya tenemos, sólo que más de ello. El proceso electrónico centrado en el hombre requerirá por el contrario un cambio de actitud mental, y se requerirá tiempo para que los vendedores ofrezcan hardware y software capaces de expresarlo. Sin embargo, el trabajo en sistemas centrados en el hombre continúa, y lo ha hecho así durante bastante tiempo, primero en la Universidad de California, Berkeley, Carnegie Mello, Georgia Institute of Technology, Washington University ...Y, naturalmente, en el Oxygen Project del MIT.
¿Qué se requerirá para que la empresas que desarrollan productos adopten el concepto de una informática centrada en el hombre?
- Ya está teniendo lugar. Microsoft ha anunciado Hailstorm, un entorno de ordenador centrado en el usuario, como ellos lo llaman, que es parte de su sistema .Net. Al final, al alcanzarse con éxito prototipos de sistemas centrados en el hombre, las nuevas empresas y las grandes compañías intentarán adoptar esas nuevas formas.
Usted afirma también que tenemos que cambiar nuestras actitudes, y centrarlas más en el hombre. ¿Qué quiere decir con eso?
- Puede tomarse como ejemplo el correo electrónico. Tenemos que hacer algo, o nos ahogaremos en un montón de e-mails. De acuerdo con una encuesta realizada, la gente emplea en promedio hora y media al día en el correo electrónico. Es absurdo emplear todo ese tiempo, que podría aumentar 10 veces en la próxima década, al llegar nuevos usuarios y emplear más tiempo los usuarios actuales en el correo electrónico. Obviamente, la gente no empleará 15 horas al día en el correo electrónico, y sólo una parte muy pequeña puede hacerse a máquina. Yo empleo sólo 18 segundos en promedio por cada e-mail, porque he establecido respuestas de acción pulsando teclas, pero incluso así lo único que consigo es retrasar el momento de sobrecarga total. Tenemos que comenzar a utilizar metadatos y lenguaje XML para incluir en nuestro correo electrónico signos que describan lo que hay en los mensajes, para que nosotros y nuestras máquinas podamos aceptar o rechazar el correo electrónico que llega. Que estemos ya todos interconectados no significa que hayamos adquirido el derecho a molestar a otras personas con nuestros mensajes, ni que estemos obligados a responder a los mensajes de otros.
¿Tendrá lugar una reacción frente a la tecnología?
- No precisamente una reacción, aunque nuestro confort y bienestar con los futuros sistemas centrados en el hombre dependerá de la persona. Puede interpretarse así: Es posible dividir a las personas en sus componentes principales, y podría considerarse a una persona como un automóvil con un motor de cuatro cilindros: los cuatro cilindros son nuestras dimensiones física, racional, emocional o artística y espiritual. La mayoría de quienes se ocupan en la tecnología funcionan sólo con uno o dos cilindros, generalmente el racional y el físico, mientras que quienes actúan en el ámbito de las humanidades, desarrollan su actividad con la misma cantidad de cilindros, el físico y el artístico. Por lo tanto, si uno actúa en el mundo de la tecnología o en el de los negocios, concentrado en planificar cosas y llevarlas a cabo, obtendrá unos resultados increíblemente mejores utilizando ordenadores.
En las empresas, los directores generales desean que sus directores de Sistemas sean personas con capacidad tecnológica y visión de futuro, dispuestos además a ofrecer un sólido beneficio sobre la inversión. ¿cómo debe abordar un director de TI el futuro que usted describe, centrado en el hombre?
- Deberá pasar por un lavado de cerebro total, con especial atención a la necesidad de que los sistemas sirvan a las personas, y no al revés. Pueden observarse por ejemplo los sistemas de reconocimiento de voz actuales. ¿Qué están haciendo con la voz las 200 nuevas empresas que se ocupan de ello? Por ejemplo, ¿Puede utilizarse el reconocimiento de voz en los negocios? Después deberá analizarse la automatiza
Usted habla de una informática centrada en el hombre, en la que el ordenador no es simplemente un dispositivo, sino toda una “habitación” en la que el proceso electrónico está en torno a uno y se siente en el aire. ¿En qué forma difiere esto de una informática de amplia difusión, ubicua y generalizada?
- Hay mucha confusión entre una informática generalizada y de uso corriente por un lado y una informática centrada en el hombre, por el otro. No son la misma cosa. El proceso de datos de propósito general implica una gran cantidad de equipos, con el énfasis en una importante cantidad de dispositivos, que son en sí mismos ordenadores. La informática centrada en el hombre, por el contrario, dirige su atención, precisamente, a los seres humanos. Hoy, los ordenadores resultan difíciles de utilizar. Y si aumentamos su difusión y utilizamos una mayor cantidad de ellos, las cosas se agravarán bastante más entre nosotros. Acentuando el énfasis en unos sistemas centrados en el hombre, estamos declarando que nuestro objetivo es servir al hombre. Que ello requiera más o menos equipos es secundario.
En ese modelo de proceso electrónico de datos que usted describe, la interacción estará activada por la voz. ¿Por qué?
- Gran parte de ello requerirá reconocimiento de voz, y no sólo activación por la voz. Hablar es natural para las personas, y por lo tanto la voz es fácil de utilizar. Es por esto que los sistemas centrados en el hombre deben tener capacidad de voz. Hay que recordar que el factor fundamental que diferenciará a los sistemas centrados en el hombre es que los ordenadores estarán a su servicio. No les importará cómo uno se comunica ni cuál es la forma más cómoda para uno. Paradójicamente, la informática seguirá un modelo antiguo, incómodo para los seres humanos pero perfecto para las máquinas: el modelo con múltiples siervos o criados “no inteligentes”. El software que servirá al hombre no adoptará una forma humana, como un robot, ni tendrá un rostro indefinible y grandes orejas. Consistirá simplemente en programas instalados allí, haciendo las cosas que uno quiera que hagan.
La informática de gran difusión se está convirtiendo en un hecho: Con teléfonos móviles, ordenadores portátiles y dispositivos manuales, podemos trabajar prácticamente en cualquier lugar. ¿Cuánto tardará en llegar la transformación que nos permitirá hacer esto y más, simplemente hablando a esa habitación en la que la informática está en torno a uno y en el aire?
- La informática generalizada y de amplia difusión es fácil. Es lo que ya tenemos, sólo que más de ello. El proceso electrónico centrado en el hombre requerirá por el contrario un cambio de actitud mental, y se requerirá tiempo para que los vendedores ofrezcan hardware y software capaces de expresarlo. Sin embargo, el trabajo en sistemas centrados en el hombre continúa, y lo ha hecho así durante bastante tiempo, primero en la Universidad de California, Berkeley, Carnegie Mello, Georgia Institute of Technology, Washington University ...Y, naturalmente, en el Oxygen Project del MIT.
¿Qué se requerirá para que la empresas que desarrollan productos adopten el concepto de una informática centrada en el hombre?
- Ya está teniendo lugar. Microsoft ha anunciado Hailstorm, un entorno de ordenador centrado en el usuario, como ellos lo llaman, que es parte de su sistema .Net. Al final, al alcanzarse con éxito prototipos de sistemas centrados en el hombre, las nuevas empresas y las grandes compañías intentarán adoptar esas nuevas formas.
Usted afirma también que tenemos que cambiar nuestras actitudes, y centrarlas más en el hombre. ¿Qué quiere decir con eso?
- Puede tomarse como ejemplo el correo electrónico. Tenemos que hacer algo, o nos ahogaremos en un montón de e-mails. De acuerdo con una encuesta realizada, la gente emplea en promedio hora y media al día en el correo electrónico. Es absurdo emplear todo ese tiempo, que podría aumentar 10 veces en la próxima década, al llegar nuevos usuarios y emplear más tiempo los usuarios actuales en el correo electrónico. Obviamente, la gente no empleará 15 horas al día en el correo electrónico, y sólo una parte muy pequeña puede hacerse a máquina. Yo empleo sólo 18 segundos en promedio por cada e-mail, porque he establecido respuestas de acción pulsando teclas, pero incluso así lo único que consigo es retrasar el momento de sobrecarga total. Tenemos que comenzar a utilizar metadatos y lenguaje XML para incluir en nuestro correo electrónico signos que describan lo que hay en los mensajes, para que nosotros y nuestras máquinas podamos aceptar o rechazar el correo electrónico que llega. Que estemos ya todos interconectados no significa que hayamos adquirido el derecho a molestar a otras personas con nuestros mensajes, ni que estemos obligados a responder a los mensajes de otros.
¿Tendrá lugar una reacción frente a la tecnología?
- No precisamente una reacción, aunque nuestro confort y bienestar con los futuros sistemas centrados en el hombre dependerá de la persona. Puede interpretarse así: Es posible dividir a las personas en sus componentes principales, y podría considerarse a una persona como un automóvil con un motor de cuatro cilindros: los cuatro cilindros son nuestras dimensiones física, racional, emocional o artística y espiritual. La mayoría de quienes se ocupan en la tecnología funcionan sólo con uno o dos cilindros, generalmente el racional y el físico, mientras que quienes actúan en el ámbito de las humanidades, desarrollan su actividad con la misma cantidad de cilindros, el físico y el artístico. Por lo tanto, si uno actúa en el mundo de la tecnología o en el de los negocios, concentrado en planificar cosas y llevarlas a cabo, obtendrá unos resultados increíblemente mejores utilizando ordenadores.
En las empresas, los directores generales desean que sus directores de Sistemas sean personas con capacidad tecnológica y visión de futuro, dispuestos además a ofrecer un sólido beneficio sobre la inversión. ¿cómo debe abordar un director de TI el futuro que usted describe, centrado en el hombre?
- Deberá pasar por un lavado de cerebro total, con especial atención a la necesidad de que los sistemas sirvan a las personas, y no al revés. Pueden observarse por ejemplo los sistemas de reconocimiento de voz actuales. ¿Qué están haciendo con la voz las 200 nuevas empresas que se ocupan de ello? Por ejemplo, ¿Puede utilizarse el reconocimiento de voz en los negocios? Después deberá analizarse la automatiza
