¿Cómo serán los chips del futuro?
Intel ha dado a conocer su visión sobre la fabricación de los procesadores en los próximos veinte años. Según sus responsables, sus proyectos de investigación previstos hasta 2020 van dirigidos a seguir desarrollando transistores más pequeños, rápidos y que consuman menos. Para ello, están indagando en los resultados que tendría el uso de materiales exóticos como nanotubos de carbono y nanocables, así como en novedosas técnicas para llevar al transistor a una escala atómica.
Actualmente Intel ha finalizado su transición hacia la fabricación de procesadores con tecnología de proceso de 90 nanómetros y ya tiene planes para emplear materiales que permitirán disminuir el tamaño de los transistores a longitudes de puerta de 10 nanómetros en 2011. Sin embargo, en torno al año 2013, Intel y el resto de las compañías de la industria del chip necesitarán otros materiales para continuar con estos ratios de disminución. Los nanotubos de carbono y los nanocables son dos de los materiales que se están planteando y que empezarán a usarse con bastante probabilidad entre 2013 y 2019. Después de esta fecha la compañía no tiene planes previstos, aunque ya trabaja con universidades de todo el mundo para perfilar con mayor exactitud este futuro.