Caja San Fernando desarrolla el Aula Virtual con tecnología IBM
Un método formativo basado en Internet
La entidad financiera ha optado por la solución Lotus LearningSpace de IBM para el desarrollo de un sistema de formación a través de Internet. Se trata de una plataforma que proporciona formación e-learning síncrona (con apoyo de profesor y participación de alumnos en tiempo real) y asíncrona (en diferido) en entornos de trabajo en grupo. La solución residirá en un servidor IBM eServer que el Gigante Azul alojará en sus instalaciones con objeto de gestionar toda la infraestructura de formación de Caja San Fernando que está basada en un servidor IBM eServer.
Caja San Fernando dispone de una implantación muy avanzada de Lotus Notes, lo que ha condicionado la adopción de tecnología IBM frente al resto de opciones del mercado. “Lotus LearningSpace es una evolución de Lotus hacia la formación en Internet. Así que hemos optado por extender esta tecnología en la entidad basándonos en el acercamiento y conocimiento previo de Lotus”, argumenta Zúñiga, quien destaca la sencillez de la herramienta. “Existen soluciones con más utilidades, pero con Lotus LearningSpace disponemos de las opciones necesarias para que los usuarios no se pierdan, además de una capacidad de acceso al curso sencilla”.
A través de la nueva plataforma, serán los propios trabajadores los que marquen su ritmo de formación, accediendo a cursos de una temática variada, frente a la limitación anterior que restringía a las materias relacionadas directamente con el área de trabajo de cada empleado. “Estamos abriendo el acceso a los cursos a todos los empleados de forma voluntaria y sin limitación, de forma que los trabajadores tienen autonomía para decidir qué cursos les interesan y cuándo pueden seguirlos. Esto aporta flexibilidad ya que evita que tengan que desplazarse para acceder a nuevos conocimientos, que cada vez tienen más cerca”, afirma Manuel Zúñiga, Jefe de Formación de Caja San Fernando.
Inicialmente estarán disponibles cursos de ofimática (sistema operativo Windows, las aplicaciones de Microsoft Office, así como Internet); matemáticas financieras; así como una biblioteca virtual con los contenidos de formación disponibles. Próximamente también se impartirán cursos de inglés, sobre temas relacionados con la seguridad y la prevención de riesgos laborales y otros de desarrollo propio. Igualmente se pondrán a disposición de los empleados foros sobre las distintas materias que afectan al entorno financiero y un centro de autoevaluación permanente para medir los niveles de conocimiento de las mismas.
En términos estimativos, la formación virtual representará anualmente un 30% del presupuesto formativo global. De forma inicial la entidad ha invertido 100.000 euros en la infraestructura de la plataforma de formación on-line, una cifra a la que hay que sumar el gasto en licencias corporativas y creación de contenidos. Mientras el curso ofimático ha sido licenciado por MDS o el de idiomas será implantado con Santillana, el relativo a productos y servicios financieros ha sido un desarrollo propio de Caja San Fernando.
La entidad no descarta llegar a acuerdos con otras empresas para aportar contenidos financieros en un futuro. “Puede que a partir del próximo año podamos plantearnos el ofrecer formación a nuestros clientes como valor añadido a las operaciones financieras que realicemos con ellos”, sostiene Manuel Zúñiga.
El Aula Virtual se ha diseñado como herramienta formativa adicional. Servirá a los alumnos como guía para estructurar los cursos y referente para la búsqueda de información complementaria. “Aunque Internet convive con el resto de técnicas formativas, irá ganando protagonismo a medida que los usuarios se habitúen a la Red, algo que llevará su tiempo pero que irá asentándose en la costumbre. En año y medio será un método más. Por sí sola, este tipo de formación sirve para acercar el conocimiento, si al margen se utiliza para apoyar acciones presenciales y puramente on-line, adicionalmente estaríamos acercando conocimiento a nuestros empelados que en presencial no tendrían opción, por tema de costes, desplazamientos, etc.”, afirma Zúñiga.
El ahorro de costes que este nuevo método aportará a la entidad no se ha determinado. Según el responsable de formación, “estamos más preocupados por extender la formación que por ahorrar. En 3 o 4 años podríamos calcularlo, pero por el momento, nos lo hemos planteado más como un acercamiento al conocimiento”.
Paralelamente, Caja San Fernando ha puesto en marcha diferentes iniciativas para familiarizar a sus empleados con la utilización de las tecnologías, entre las que figura facilitar a su plantilla de forma permanente la compra de ordenadores con préstamos a interés cero.