Barreras a la inteligencia

Un estudio publicado recientemente por Gartner concluye que en las grandes organizaciones “conviven” una media de 13 aplicaciones de business intelligence (BI) de al menos cuatro proveedores distintos, una situación que, en la práctica, acaba generando caos y que lleva a la ingobernabilidad de una información que resulta vital para el éxito del negocio.
El estudio de Gartner señala la paradoja de que no siempre la abundancia y la variedad de la oferta es lo deseable, por lo menos para los directores de TI, que deben vérselas con la problemática derivada de manejar diferentes aplicaciones de diferentes proveedores en distintos departamentos. Una situación que, lejos de resolverse, se complicará en el futuro con la llegada de nuevos actores al escenario del BI.
Se preguntarán qué es lo que ha pasado para llegar a esta situación. Muy sencillo. Las soluciones de BI han tenido hasta hace muy poco un carácter muy fragmentario y su uso se ha limitado a determinadas áreas de actividad de la empresa. Imagínense una compañía donde un departamento utiliza determinadas funcionalidades de un ERP que le resuelve una problemática concreta. Pasado un tiempo, y a la vista del éxito de ese departamento, otro decide instalar un nuevo ERP para usar otras funcionalidades distintas y así sucesivamente hasta contar con una serie de ERP de diferentes fabricantes, incapaces de generar las necesarias sinergias en el negocio.
Algo parecido, salvando las distancias, ha pasado con la soluciones BI, especialmente con las herramientas de reporting. El problema no es que no fueran buenas y oportunas, sino el resultado: un entramado de aplicaciones inconexas, útiles en sí mismas, pero ineficientes en el conjunto del negocio.
Una situación derivada del carácter fragmentario de la penetración del BI en las empresas, concebido bien como sistema de ayuda a la toma de decisiones para unos pocos, como cuadro de mando para determinados departamentos o como solución de reporting, nunca como una solución integral para el conjunto de la empresa.
Hoy en día la realidad es otra y el BI aparece como una pieza clave para el conjunto del negocio, cuyos tentáculos deben llegar a todos los departamentos, que deben disfrutar a su vez de las ventajas que aporta. No tiene sentido tener visiones parciales del negocio, es imprescindible disponer de una visión de conjunto y poder llegar del total a lo particular y viceversa.
Pero es algo de lo que nos hemos dado cuenta ahora y la gran ventaja es que estamos a tiempo de corregirlo con soluciones integrales que consoliden toda la información del negocio, que nos permitan conocer el pasado de nuestra empresa, controlar su presente y anticiparnos a la evolución de su futuro, atendiendo por igual a las necesidades globales como a las particulares a partir de una base común de información y datos. Es el momento de levantar las barreras a la inteligencia en nuestro negocio.


J.M. Alonso es director general Hyperion Solutions Iberia.

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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