AMD versus Intel
La pugna judicial iza las opiniones de usuarios, proveedores y consultores
No es ni la primera ni la última vez que se interponen demandas judiciales contra fabricantes del sector. De hecho, por ejemplo, Microsoft acumula alguna que otra por prácticas ilegales en el sector de los sistemas operativos y los navegadores web. Sin embargo, la última registrada y hecha pública de forma oficial tiene fecha del 28 de junio y las reacciones se suceden casi a diario de la mano de usuarios, clientes y otros protagonistas del sector.
Y es que a finales del pasado mes de junio AMD anunciaba que había presentado una demanda judicial contra Intel ante la corte federal del distrito de Delaware (Estados Unidos). El motivo: supuestas prácticas monopolísticas ilegales.
La demanda expone cómo Intel ha mantenido su monopolio de forma ilegal en el mercado de los microprocesadores x86, coaccionando a clientes de todo el mundo para que no negocien con AMD. De hecho, en base al informe de corte acusatorio presentado por los abogados de AMD, Intel habría presionado de forma ilegal hasta a 38 compañías, entre las que se encuentran integradores de sistemas, distribuidores y vendedores, para que utilizasen en exclusiva procesadores Intel, dejando de lado los microchips fabricados por AMD. Entre las empresas listadas se encuentran pesos pesados como Dell, Sony o Toshiba.
Por otro lado, AMD también acusa a Intel de aprovechar la situación para mantener los precios de los chips exageradamente altos en beneficio propio y aprovechándose de la situación de monopolio y de sus prácticas ilegales.
La demanda de AMD también cita que en 2002 ofreció chips a HP para sus Evo, a lo que el fabricante respondió solicitando un fondo trimestral de 25 millones de dólares para compensarle de la posible reacción de Intel. También se afirma que Intel ofreció dinero para persuadir a los fabricantes de que no hicieran negocios con AMD, como por ejemplo a Gateway o Compaq Computer, adquirida por HP en 2001.
Esta no es la primera causa legal por supuestas prácticas monopolísticas a la que Intel se enfrenta. Hace unos meses la compañía californiana perdió un juicio por el mismo tema en Japón y la Comisión Europea está estrechando el cerco sobre las actividades del fabricante norteamericano por los mismos motivos.
Reacciones en cadena
Tras el verano, Intel se posicionó al respecto enviando un comunicado oficial, de 63 páginas, que negaba, de forma rotunda, cualquier tipo de prácticas de corte ilegal y ratificando su “legalidad y juego limpio” según el mismo. Asimismo, exponía que las demandas de AMD son falsas y contradictorias y es posible que acaben “haciendo un serio daño a los clientes, más que contribuir a ayudarles”. Según un portavoz de Intel, con esta demanda AMD busca culpabilizar a esta compañía de sus propios fracasos, que son resultado directo de sus acciones o, más bien, falta de acciones”.
Asimismo, en el documento enviado por Intel, presidida por Paul Otellini, se describe el modelo del mercado mundial de semiconductores, que ha registrado un “rápido crecimiento, gracias a tres factores principales: producción, producto y precio”. Finalmente, el comunicado alude al “auténtico” interés de AMD con la denuncia interpuesta de impedir que bajen los precios del mercado.
Dos días después, AMD tomaba su turno y alegaba: “la respuesta de Intel no es sorprendente teniendo en cuenta lo que está intentando ocultar, pero su violación de las leyes antimonopolio es un hecho claro e innegable”, afirma Thomas M. McCoy, vicepresidente ejecutivo y director administrativo y de asuntos legales de AMD. “Las prácticas empresariales anticompetencia de Intel están siendo minuciosamente analizadas por gobiernos de todo el mundo. La Comisión de Prácticas Comerciales Justas de Japón, basándose en pruebas directas, ha declarado que Intel ha incumplido las leyes antimonopolio, con el consiguiente perjuicio para los consumidores, pero Intel sigue negándose a reconocer sus malas prácticas. La conducta ilícita de Intel obliga a los clientes y consumidores a pagar precios artificialmente elevados y limita sus opciones a la hora de elegir los mejores productos disponibles”.
“Estamos deseando presentar nuestras pruebas ante el sector y ante el mundo entero. Vamos a sacar la verdad a la luz y dejar que decida un tribunal”, ha afirmado también McCoy.
La opinión de usuarios y “partners”
Mientras AMD e Intel pugnan por dinero y “dignidad” en el mercado, la opinión de los usuarios refleja el sentir de los mismos que, más allá de la potencial ilegalidad de las prácticas de Intel, temen por las consecuencias que ello puede llegar a tener.
¿Generará un incremento en los precios de microchips?, ¿cuánto habrá que pagar en el futuro? Las respuestas varían, lo que no repercute en seguridad, sino que acrecienta la inquietud en el sector. Además, hay un buen número de usuarios que piensan que el efecto de la posición dominante de Intel en el mercado ha sido la bajada de los precios.
Hay pareceres para todos los gustos. Si bien hay voces que reconocen las verdaderas prácticas monopolísticas de Intel al hacer procesadores con características que únicamente pueden aprovechar sistemas operativos de ciertas compañías y ciertos modelos de estos, mientras que aluden a la conveniencia de que la máquina sea totalmente independiente del SO. Por otro lado, hay quienes aluden a las “recomendaciones” que hace Intel en las cajas de sus microchips, reconociendo la mejor operatividad con Windows. Y es que los acuerdos con socios de negocio son moneda al uso en el mercado de TI.
Se trata, sin duda de un tema espinoso que puede provocar “daños colaterales”. Conscientes de ello, algunos de los proveedores preguntados sobre su opinión en torno a la demanda en sí y sus consecuencias en el mercado, como en el caso de IBM, HP o Toshiba, han preferido no pronunciarse al respecto. Según fuentes de IBM, “nunca se hacen valoraciones acerca de otras empresas y más al estar abierto un proceso legal”. Por su parte, Pablo Romero, director de Marketing de Toshiba, reconoce que “las consecuencias finales que puedan derivar de este caso siempre dependerán de las decisiones que finalmente adopten los tribunales”.
El fallo de las consultoras
------------------------------------
Sin duda, está resultando muy polémica la demanda interpuestas por parte de AMD contra Intel por supuestas prácticas monopolísticas.
Si revisamos las cifras de las consultoras, podemos apreciar que, según IDC, alrededor del 84% de los procesadores x86 vendidos a nivel mundial son de Intel, y el 14% restante de AMD. Lo que evidencia la clara supremacía de Intel. Pese a ello, “es necesario ratificar si realmente Intel ha activado procesos fraudulentos para alc