Al usuario le están poniendo constantemente en dificultades a la hora de tomar decisiones
Al usuario le están poniendo constantemente en dificultades a la hora de tomar decisiones. Por supuesto que en situaciones siempre favorables, pero la habilidad de los fabricantes para lanzar nuevos productos, casi sin solución de continuidad, le sumergen en un mar de dudas sobre la conveniencia o no de esperar un poco más ante la evidencia de que va a adquirir algo todavía mejor y posiblemente a menos precio. Hay que evitar entrar en esta espiral porque, con tales planteamientos, la fijación del momento óptimo para contratar conduciría a la desesperación. Pero, si un mismo fabricante nos va jalonando el camino de sus presentaciones, y distribuye consejos para que cada cual componga su propia fórmula de rentabilidad, el usuario agradece los esclarecedores mensajes. Muchos se congratularán de los avances aportados en nuestro país por un alto responsable de Intel, anunciando la presentación del procesador P6, más potente que Pentium, para 1995. ¿Dejará en situación de semiobsolescencia al 486? ¿Cómo reaccionarán quienes tenían planificados compras de equipos con este procesador durante el presente año? La mayoría los adquirirán porque, teniendo en cuenta la utilización prevista, les podría sobrar potencia.
La discrepancia en la forma de ver o interpretar situaciones es el común denominador de los profesionales influenciados por vivencias favorables o adversas que, en base a ello, transmiten su estado de ánimo. He hablado con personas de IBM que cuestionan la permanencia de su actual consejero delegado, Juan Carlos Usandizaga, y con otros que haciéndome una auténtica apología profesional de él, me aseguran que atesora méritos más que suficientes para ser nombrado también presidente. Si esto ocurre, próximamente, ¿continuarán los detractores de salón hilvanando sus milongas?