Aetic pide al gobierno que influya en la reactivación de la inversión

Celebra la primera reunión de la junta tras la fusión

La pasada semana tuvo lugar en Madrid la primera reunión de la junta directiva de Aetic (Asociación de Empresas de Electrónica, Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones de España), fruto de la fusión de Aniel y Sedisi, configurando un organigrama con Jesús Banegas (ex presidente de Aniel) como presidente, José María Vilà (ex presidente de Sedisi) de vicepresidente, y Gonzalo Caro (ex director general de Aniel) de directtor general, y una estructura basada en seis grupo verticales que tratan de abarcar los intereses de sus asociados: electrónica de consumo, componentes electrónicos, electrónica profesional, equipos de telecomunicación, operadores proveedores de servicios de telecomunicaciones y tecnologías de la información.

En su actual configuración, la patronal del sector representa a cerca de 1.000 empresas que suponen el 40% del esfuerzo del privado nacional en I+D y cuyo volumen de actividades asciende a un valor superior a los 65.000 millones de euros.
Además de una organización “lo más flexible posible”, según palabras de Vilà, el principal cambio de la nueva organización es la ausencia de Joaquín Oliveras, hasta el momento director general de Sedisi, “que ha decidido dedicarse a temas personales”.
Para Banegas, “el crecimiento del sector está por encima del crecimiento de la economía y a largo plazo puede alcanzar una dimensión que no han alcanzado otros”. Para lograrlo, España debería invertir en capital tecnológico, formación, innovación y un nuevo sistema de relaciones laborales. De esta forma, el presidente de la patronal pidió al nuevo gobierno que contribuya a atajar “el grave problema de la reactivación de la inversión existente, esforzándose por mejorar la productividad, tratando de reducir el déficit formativo, estimulando la innovación y estableciendo un sistema de Relaciones Laborales flexible y adaptativo a los cambios”.
Banegas también aprovechó para lanzar una crítica al antiguo gobierno, personificado en la figura del ministerio de Ciencia y Tecnología, con el que aseguró mantener buenas relaciones pero estar carente de poder político alguno para desarrollar sin limitaciones los acuerdos alcanzados. Con respecto a la desaparición de esta cartera, al presidente de Aetic no le “importa en qué ministerio se alojen las tecnologías, siempre que las decisiones alcanzadas prosperen”.

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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