40G ó 100G: Cómo apoyar un crecimiento de ancho de banda sostenible
En el mercado español, el número de usuarios de Internet ha crecido más de un millón durante el último año, según datos de la CMT, y nuestro país tiene una de las cifras más altas de usuarios de IPTV en Europa. Entre los principales indicadores que determinan este incremento en la demanda encontramos el auge de servicios como IPTV, Voz sobre IP o vídeo bajo demanda o la emergencia de Web 2.0. Los nuevos protocolos de vídeo y voz requieren, por otro lado, cada vez más calidad y más ancho de banda, por lo que los operadores de telecomunicaciones y proveedores de servicios tienen que asegurarse de que poseen las infraestructuras necesarias para apoyar este crecimiento exponencial, al tiempo que proporcionan a los usuarios un servicio de alta calidad.
Lógicamente, la demanda de circuitos de alta velocidad como 40G y 100G crecerá a medida que la demanda de ancho de banda aumente cuando un mayor número de personas adopten estos servicios. De todas formas, el verdadero debate entre los operadores radica en si 40G ó 100G es la mejor forma de transportar el tráfico de datos que requieren un elevado ancho de banda.
Ciena considera que 40G forma parte de un proceso de migración gradual a 100G. El empleo de la tecnología 40G puede ayudar, no sólo a solucionar los actuales obstáculos técnicos con 100G, sino que también puede ayudar a reducir la curva de precio de 100G de forma más rápida. Si 100G puede aprovechar tecnologías presentes en 40G, como nuevos formatos de modulación y nuevos componentes integrados, el resultado puede ser una temprana reducción de costes y puede incrementar la aceptación en el mercado y acelerar el uso de 100G en uno o dos años.
V. Arroyo es director de ventas de área de Ciena para España y Portugal.