La Enciclopedia Británica deja de publicar su edición impresa
Después de 244 años, la Enciclopedia Británica, símbolo del saber y el conocimiento en habla inglesa, dejará de publicarse en soporte físico para concentrarse en la oferta digital, donde este campo ha sido cubierto hasta ahora por pequeñas webs especializadas y grandes proyectos de colaboración como la Wikipedia.
Britannica ha impreso su enciclopedia, que ahora ocupa 32 volúmenes, desde 1768. La edición 2010 fue la última edición que la compañía publicó tras lo que ahora se ha decidido no publicar la que sería la versión de 2012. "Nos gustaría pensar que nuestra tradición no es la de imprimir, sino la de llevar el conocimiento académico a la gente", afirma George Cauz, presidente de la Enciclopedia Británica.
El movimiento de Britannica para detener la impresión de sus enciclopedias sirve para poner de manifiesto el trascendental momento que vivimos, con un cambio de paradigma revolucionario en que la impresión está siendo reemplazada por sitios web y aplicaciones conectadas a la red.
De hecho, en los últimos años, la edición impresa representó menos del 1 por ciento de los ingresos de Britannica. "El mercado no está allí", explica Cauz. La cantidad de material que la empresa ha acumulado en línea ha empequeñecido la edición impresa. Además, el esfuerzo que se necesita para empacar lo más relevante de esa información en forma de libro es muy considerable para la empresa. Incluso el precio es más asequible: La suscripción básica para la versión en línea anda en torno a los 17 dólares por año o 1.99 dólares al mes, mientras que la edición completa en papel cuesta 1.400 dólares.
La compañía viene ofreciendo una edición en línea de la enciclopedia desde hace ya 20 años y ahora la mayoría de sus ingresos provienen ya de productos en línea y aplicaciones móviles. En ese sentido, las ediciones en línea se han atendido a más de 100 millones de estudiantes y el sitio recibe más de 580 millones de visitantes al año.
Eso sí, Cauz admitió que la empresa debe trabajar más para mantener su nombre y su reputación ante su público potencial. Al moverse a un entorno completamente en línea, Britannica se enfrentará frente a frente al gigante Wikipedia, la enciclopedia libre escrita por voluntarios. Un modelo que la propia Enciclopedia Británica ha ido copiando, recopilando y editando la información de una manera similar a la comunicad de Wikipedia.
La Enciclopedia Británica se actualiza constantemente en su versión online. Se incluyen los activos multimedia, tales como grabaciones sonoras y de vídeo, así como proporciona un foro para que los usuarios contribuyan con sus propias aportaciones, que después son analizadas por los editores. También solicita contribuciones de personalidades notables de todo el mundo, como Bill Clinton, Desmond Tutu o Tony Hawk.
Para dar cancha y publicidad a la oferta online, Britannica ofrecerá su enciclopedia en línea de forma gratuita toda una semana, a partir del miércoles.