El sector financiero apuesta por la nube para expandir los servicios de testing y la movilidad
El 70% de las organizaciones del sector están externalizando sus prácticas de testing, si bien sólo un 3% lo hace en su totalidad, de acuerdo a un reciente estudio publicado por Capgemini, Sogeti y HP.
Los bancos y cajas de ahorros están apoyándose cada vez más en los servicios SaaS y en la nube para la creación de centros de excelencia en testing y la preparación para los futuros servicios móviles. De esta forma el sector está tratando de responder a las exigencias de los departamentos de TI la necesidad de focalizarse en el cumplimiento de las legislaciones de los mercados en que operan, en el crecimiento del negocio y en la optimización de costes.
De acuerdo a un estudio de Sogeti y Capgemini, patrocinado por HP, un 73% de las empresas del sector declara que, a corto plazo, migrará hasta un 50% de sus aplicaciones al entorno cloud. Mientras que sólo el 15% aseguran no tener planes para migrar sus aplicaciones o hosting en los próximos años. Asimismo, el estudio evidencia que el 70% de las organizaciones del sector externalizan sus prácticas de testing, pero sólo el 6% lo hacen para un porcentaje de sus aplicaciones que oscila entre un 76% y un 100% de las mismas. A ello hay que añadir que sólo el 3% declara externalizar el testing del 100% de sus aplicaciones.
El informe también pone de manifiesto que tan sólo un 1% de las empresas dispone de un centro de excelencia de testing debido a que éstos requieren un tiempo considerable (entre seis y 24 meses), para que sean totalmente operativos. Sin embargo, el 55% asegura haber comenzado a desarrollarlos o tener en mente hacerlo a corto plazo. El estudio concluye hablando del nivel de madurez de los procesos de testing en el sector financiero. Si bien este nivel es similar al de otros sectores en cuanto a asegurar la calidad, aún está lejos en cuanto al uso de metodologías estándares de mercado. Sin embargo, en 2011 el número de entidades que ha usado metodologías estándar se ha multiplicado por dos con respecto a 2010.