Tecnología de simulación al servicio de la creación de empleo
Indra crea un simulador de maquinaria de obras
Dado el dinamismo de la construcción pública y para hacer frente a la demanda de técnicos especializados, el Centro de Formación Ocupacional (CFO) de Paracuellos del Jarama, dependiente del Servicio Regional de Empleo de la Consejería de Empleo y Mujer de la Comunidad Autónoma de Madrid cuenta desde el pasado 11 de octubre con un Centro de Simulación de Máquinaria de Obras Públicas desarrollado por Indra.
“Con este desarrollo, es posible entrenar procedimientos de urgencia para el manejo de las máquinas que en real y sin experiencia previa resultarían peligrosos”, explica Ismael Ayala, responsable técnico del proyecto en el seno de Indra.
El centro está dotado de dos cabinas de entrenamiento que simulan el funcionamiento de un dumper y una pala cargadora y de una motoniveladora y una retroexcavadora, respectivamente.
En el primer caso, el campo de visión es de 180º y en el segundo, donde es más complicado el manejo, el campo se amplía hasta una visión de 360º.
La ingeniería, la integración y el desarrollo del software de simulación ha sido concebido al 100% por Indra, utilizando en el apartado del hardware sistemas comerciales estándares.
En el proceso de formación intervienen activamente tanto el profesor como el alumno. Para ello se han habilitado diversos puestos de formación previa para que los alumnos se familiaricen con las máquinas y dos puestos de instructor para la definición seguimiento y control de los ejercicios realizados por el alumno. Un total de siete alumnos puede realizar ejercicios a la vez y una zona de proyección permite que el resto pueda ver el ejercicio de sus compañeros comentado por un monitor.
En la posición del instructor, éste planifica el ejercicio, que se reproduce en real y queda guardado en un histórico de entrenamientos para poder analizar posteriormente fallos, vicios o errores.
Dentro de la cabina, el alumno tiene que resolver una serie de retos planteados por su instructor como pueden ser la modificación de las condiciones ambientales (cambios en la temperatura, en la meteorología, en la iluminación); los distintos tipos de terreno (arena, grava, gravilla) o la simulación de averías (pinchazo de ruedas, calentamiento del motor, desperfectos electrónicos en la transmisión, fallos en el filtro de aire, en el sistema hidráulico, en la dirección o en la suspensión, etc..). En este último punto el alumno tiene que identificar de qué tipo de avería se trata y solucionarla.
La cabina y los visuales reproducen con absoluta fidelidad el entorno operativo con el que se encontrará el futuro operador de esta maquinaria. “El instructor, desde su puesto de operación, puede poner al alumno en situaciones límite, algo que no sería posible utilizando maquinaria real”, comenta Ayala.
El proyecto del centro de Paracuellos surge a raíz del buen funcionamiento de un simulador similar también creado por Indra en una mina de Ponferrada. La compañía tiene una amplia experiencia en simulación militar que se inicia 30 años atrás. En simulación civil llevan seis años creando simuladores de metro, trenes de alta velocidad, autobuses, grúas portuarias y, como en este caso, maquinaria de construcción de obra pública.
Paulino Hernández, director del centro, comenta que su apuesta por los sistemas de simulación ha sido “casi extremista”. La apuesta de la Administración por las nuevas tecnologías es casi una cuestión de responsabilidad. Son caras, pero su interés didáctico justifica el gasto y, sobre todo, sirven para evitar los accidentes de los alumnos. Podemos así aminorar las incidencias y llevar los sistemas al límite sin riesgo”.
Hernández insiste en que cuando el alumno sube por primera vez a la máquina real, “aunque nunca la ha tocado ya conoce las intensidades, frecuencias y desviaciones del vehículo, de forma que su capacidad de respuesta ya está entrenada”.
Aún no se ha “licenciado” la primera promoción de operarios formados con el simulador pero según el director del centro no hay resistencia al entorno tecnológico sino más bien todo lo contrario: “les gusta, les da confianza, les motiva y con él se sienten seguros. Esto era fundamental porque, en última instancia, el juez del sistema iba a ser el alumno”.
El centro en cifras
--------------------------
El Centro de Formación Ocupacional (CFO) de Paracuellos del Jarama es referente nacional en su especialidad: Edificación y Obras Públicas. Opera desde hace 33 años y se trata del primer CFO creado en España. Tiene una capacidad para 250 alumnos y nunca se dan cursos con más de diez alumnos por clase.
La finca donde se imparte la formación tiene 30 hectáreas de terreno de las cuáles 8.000 metros cuadrados constituyen el edificio de formación teórica. Los 292.000 metros cuadrados restantes se dedican a las cuestiones prácticas relacionadas con los cursos.
Entre los más destacados cabe mencionar, además de la formación en maquinaria de obra pública, los destinados a formar expertos en explanación, mecánica, delineación, construcción, topografía, albañilería y jardinería.