"Fuimos los primeros en ver el potencial de la convergencia"
Vicente Yeves, miembro del consejo asesor de T-Systems
La creación de T-Systems supuso la primera apuesta por el proceso de convergencia que está sufriendo el mercado, ¿qué ventajas les reportó haber dado ese paso?
- Efectivamente fuimos los primeros en ver el potencial de la convergencia de las TI y las telecomunicaciones, lo que nos permitió entrar en un área donde antes no entrábamos, las telecomunicaciones y el servicio a los operadores. En enero de 1999, Daimler compra a Chrysler y se decide la venta de la división de Informática y Comunicaciones, Debis. Todos los grandes agentes del momento ofertaron por la compra, IBM, EDS, Siemens, o Deutsche Telekom, entre otros, con quien finalmente se llegó a un acuerdo.
¿No hubiese sido más lógico que una empresa de consultoría se aliara con otra típica del mercado informático, como IBM?
- Supongo que sí, pero quizás detectaron muchas redundancias, mientras que en Deutsche Telekom se vio al candidato idóneo.
La gran baza de T-Systems es el tráfico internacional, ¿cómo se conjuga esto sin infraestructura propia en España?
- De una forma muy sencilla, y es que no queremos tenerla. Nuestro primer paso fue solicitar la licencia de operador de Deutsche Telekom en España, y empezamos a diseñar los nuevos servicios, básicamente enfocados a empresas y operadores. Deutsche Telekom puede cerrar el bucle del tráfico internacional en más de 90 países pero hemos sido conservadores en el despliegue de infraestructuras. En España trabajamos con independencia de la infraestructura, usamos las de Telefónica, las autopistas o el tendido eléctrico.
Para zanjar la polémica sobre la privatización de la administración pública catalana, reactivada con la reciente renovación del contrato, ¿cómo pudo superar la oferta de T-Systems la del resto de competidores?
- Por flexibilidad y garantía en el mantenimiento de los puestos de trabajo. Al tener muy poco peso específico en España, dado que la fusión se acababa de producir, fuimos los únicos en garantizar el empleo a los 400 trabajadores implicados en la reestructuración. Además, contábamos con la solvencia de un gran grupo detrás como es Deutsche Telekom.
Este contrato supuso la entrada de un nuevo jugador en el mercado español, ¿de qué forma le abrió las puertas del outsourcing?
- Nos abrió las puertas del outsourcing y de la gestión de sistemas en general, porque el contrato de la Generalitat también lleva implícito el diseño y desarrollo de procesos.
¿Ha sido la consolidación de T-Systems en el ámbito público español la vía para sortear la crisis?
- España no hemos estado nunca en crisis. Desde la creación de la compañía siempre hemos cerrado con beneficios. Dicho esto, sí es destacable el papel de la Administración Pública para T-Systems, que representa el 60% de nuestro negocio, pero también lo son nuestros clientes recurrentes, donde hemos crecido mucho.
Con esta estabilidad, ¿qué os lleva a la reestructuración de 2002 saldada con la creación de la división de consultoría y el lanzamiento de Detecom Consulting?
- Poner en práctica una estrategia del grupo que no es otra que pasar de los servicios informáticos a los de telecomunicaciones y del área de gestión y desarrollo de sistemas a una capa superior de consultoría.
¿Cómo os afecta la implantación de Detecom?, ¿actuarán como competidores de T-Systems?
- Somos complementarios, de hecho, Detecom se forma con empleados de T-Systems en España. Está orientada hacia la consultoría estratégica con dos focos: servicios para mejorar las compras y el área de los operadores.