El software del Siglo XXI se impone en la operativa empresarial
Los últimos estudios de la consultora Gartner sobre el mercado de software de aplicación apuntan a que el entorno de gestión será una de las áreas de mayor crecimiento en los próximos años, debido a que es un sector “claramente emergente” y “todavía lejos de alcanzar la saturación que caracterizan a otros entornos”, principalmente en el mercado de la pequeña y mediana empresa.
Las organizaciones se enfrentan hoy en día a un volumen intenso y creciente de información que han de almacenar, procesar y analizar, una de las claves del éxito para que el software de aplicación se halla extendido en los últimos años, tras las inversiones realizadas en la década de los ochenta en bases de datos, seguido posteriormente por las de automatización de procesos. Es por ello que los principales analistas de mercado señalan que es ahora cuando las organizaciones tratan de obtener el valor y capitalizar sus infraestructuras, donde el software de aplicación marca la pauta en cuanto a mejora y simplificación se refiere.
Las perspectivas del mercado de software de aplicación son muy buenas debido a la tendencia, cada vez más extendida entre proveedores y clientes, de entender el software como un servicio y los nuevos modelos de contratación, gestión, administración y mantenimiento, tales como el outsourcing.
Beneficios tangibles
Los últimos estudios reflejan que en torno al 42% del software de aplicación que se utiliza en las grandes compañías a nivel mundial es de desarrollo propio, un 54% es desarrollo a medida y, el resto, paquetes estándares. Otro de los indicadores es que más del 65% de estas organizaciones ha implementado una solución ERP y el crecimiento en su adopción es creciente.
Si esto lo trasladamos al mercado español, estudios realizados por Grupo Penteo y PriceWaterhouse Coopers, ponen de manifiesto que más del 75% de las grandes empresas nacionales cuenta con un sistema de gestión empresarial, si bien sólo un 15% de los mismos lo explota correctamente a pesar de que afirman obtener beneficios tangibles, tales como la mejora en sus procesos de negocio (80%), el incremento en cantidad y calidad de información de sus clientes (65%) o la optimización de su inventario (35%).
Según los datos que se aportan en dichos estudios, la tendencia de las aplicaciones estará centrada a corto plazo en optimizar la implantación, centrar los procesos en el cliente, mejorar el front office para facilitar su uso y explotación donde Internet va a ser la base de su funcionamiento como canal de comunicación.
En todo este proceso de consolidación, las herramientas de colaboración en tiempo real para intercambiar y compartir la información empresarial conforman una nueva vía para dotar de mayor eficacia a los procesos y tareas operativas. En este sentido, las aplicaciones personalizadas, centralizadas y seguras se han convertido en otra de las apuestas de inversión de las compañías para facilitar el acceso a la información a toda la organización a nivel interno y externo a través de portales empresariales, además de fomentar la automatización de numerosos procesos, con el consiguiente ahorro de tiempo y costes.
Sin embargo y bajo el mismo denominador común, analistas y proveedores aseguran que todavía existen importantes barreras para que este tipo de aplicaciones prolifere no sólo en grandes corporaciones sino, fundamentalmente, en el segmento pyme. Una de ellas es el tiempo de implantación y los procesos posteriores de formación y adopción por parte de los usuarios, para lo cual cada vez es más importante realizar proyectos para ellos y no para el departamento de informática, que era la práctica establecida. En este cambio de mentalidad, la experiencia del equipo de consultoría e integración juega un papel vital, abriendo la puerta a soluciones preparadas listas para usar y funcionar.
Entorno cambiante
En cuanto al mercado de proveedores se refiere, la consultora IDC asegura que “la competencia en el mercado de aplicaciones está originando un movimiento hacia el desarrollo de las llamadas killer applications, en el que fabricantes como SAP y Oracle, y de middleware como IBM o Bea, se perfilan hacia la definición de sus propias plataformas de killer applications”.
Actualmente, la mayor parte de los proveedores de software empresarial se han especializado en soluciones de gestión financiera (ERP), aprovisionamiento (SCM), gestión de clientes (CRM), con una tendencia clara hacia la integración de todas estas funcionalidades en un solo sistema, como señalan algunos informes de Penteo y PWC, con un incremento a corto plazo en lo que se denomina gestión del rendimiento empresarial.
Los términos clave de este mercado emergente son centralizar, simplificar, automatizar y converger con otras tecnologías de comunicación, requisitos que las consultoras califican de cumplimiento imprescindible del software empresarial del presente siglo. La tendencia de futuro de las aplicaciones está en su convergencia con otras tecnologías: soluciones de movilidad y multicanalidad, que dependerá de la calidad de la información que las promueva y de los flujos de negocio definidos por cada organización.