El director ejecutivo de Qualcomm asegura que "tarde o temprano" habrá entendimiento con Nokia. Así lo declaró en la feria anual de la compañía en la que se desveló el estado de su plataforma BREW
(San Diego, EE.UU.).- BREW 2007 se celebró en San Diego (EE.UU.) del 20 al 22 de junio; en el congreso se dieron cita desarrolladores, partners y demás actores del negocio que utilizan BREW para el desarrollo de software para móviles. Se trata de una plataforma propiedad de Qualcomm, uno de los mayores fabricantes de chips para teléfonos móviles.
En EE.UU. BREW ya se ha hecho con un 38% del mercado, frente al 58% que está en manos de Java. Cifras “alentadoras” según fuentes de la compañía. Los desarrolladores han conseguido alcanzar un billón de dólares de beneficio y KDDI, segundo operador japonés, suma ya 160 millones de descargas de aplicaciones basadas en BREW entre sus usuarios. La implantación de la plataforma en España es algo en lo que están trabajando desde la compañía; para ello han mantenido conversaciones con Telefónica Movistar. “De momento, las conversaciones no han dado frutos, pero sería importante contar con un aliado como Movistar para introducir la plataforma primero en Sudamérica y después dar el salto a España”, afirma Paul Jacobs, director ejecutivo de Qualcomm. BREW ya está operativo en Italia, Austria y Reino unido y, según fuentes de la compañía, Telefónica Movistar estaría esperando a ver cómo funciona la plataforma en estos mercados para ofrecer contenidos basados en BREW en España.
Por otra parte, Jacobs calmó las aguas entre Qualcomm y Nokia, hasta ahora revueltas debido a un contencioso por el pago de patentes. El enfrentamiento comenzó a principios de 2006. Fue durante la renovación del contrato de licencias en virtud del cual Nokia debía abonar cierta cantidad previamente estipulada a Qualcomm para seguir utilizando sus patentes. Nokia manifestó que las contribuciones de Qualcomm a los estándares móviles actuales son menores que cuando se firmó el acuerdo y que la cifra a pagar debería ser menor. La compañía finlandesa aseguró que, de entrar en enfrentamiento directo, Qualcomm tendría las de perder, pues la norteamericana debería dejar de usar algunas patentes propiedad de Nokia. Jacobs tendió un puente a la esperanza en el congreso: “Es sólo cuestión de tiempo que las aguas vuelvan a su cauce y encontremos un entendimiento mutuo, pues se están perdiendo muchos millones de negocio. De todas formas, nosotros tenemos en nuestro poder 140 patentes, así que tampoco tenemos por qué preocuparnos de nada. Lo que sí es cierto es que Nokia es una empresa de mucho peso porque siempre ha sabido negociar”.
En EE.UU. BREW ya se ha hecho con un 38% del mercado, frente al 58% que está en manos de Java. Cifras “alentadoras” según fuentes de la compañía. Los desarrolladores han conseguido alcanzar un billón de dólares de beneficio y KDDI, segundo operador japonés, suma ya 160 millones de descargas de aplicaciones basadas en BREW entre sus usuarios. La implantación de la plataforma en España es algo en lo que están trabajando desde la compañía; para ello han mantenido conversaciones con Telefónica Movistar. “De momento, las conversaciones no han dado frutos, pero sería importante contar con un aliado como Movistar para introducir la plataforma primero en Sudamérica y después dar el salto a España”, afirma Paul Jacobs, director ejecutivo de Qualcomm. BREW ya está operativo en Italia, Austria y Reino unido y, según fuentes de la compañía, Telefónica Movistar estaría esperando a ver cómo funciona la plataforma en estos mercados para ofrecer contenidos basados en BREW en España.
Por otra parte, Jacobs calmó las aguas entre Qualcomm y Nokia, hasta ahora revueltas debido a un contencioso por el pago de patentes. El enfrentamiento comenzó a principios de 2006. Fue durante la renovación del contrato de licencias en virtud del cual Nokia debía abonar cierta cantidad previamente estipulada a Qualcomm para seguir utilizando sus patentes. Nokia manifestó que las contribuciones de Qualcomm a los estándares móviles actuales son menores que cuando se firmó el acuerdo y que la cifra a pagar debería ser menor. La compañía finlandesa aseguró que, de entrar en enfrentamiento directo, Qualcomm tendría las de perder, pues la norteamericana debería dejar de usar algunas patentes propiedad de Nokia. Jacobs tendió un puente a la esperanza en el congreso: “Es sólo cuestión de tiempo que las aguas vuelvan a su cauce y encontremos un entendimiento mutuo, pues se están perdiendo muchos millones de negocio. De todas formas, nosotros tenemos en nuestro poder 140 patentes, así que tampoco tenemos por qué preocuparnos de nada. Lo que sí es cierto es que Nokia es una empresa de mucho peso porque siempre ha sabido negociar”.
