De los mapas a los GIS

El concepto de Sistema de Información Geográfica (GIS, en sus siglas en inglés) tiene como antecesor al mapa como representación simplificada de la realidad geográfica. Un GIS es un mapa digital con muchas capas y en cada una se recoge un aspecto de la realidad de una zona geográfica, tales como los ríos o los usos del suelo. En resumen, un GIS es un modelo o maqueta de la realidad, la cual, se observa mediante mapas, gráficos, planos de instalaciones, o listados.

Con el GIS se puede, entre otras muchas cosas, expresar proyectos, seguir la evolución de algún aspecto medioambiental, gestionar las infraestructuras o propiedades inmobiliarias, seguir la evolución de una flota de vehículos, gestionar la seguridad o la defensa de un territorio. Este mapa inteligente está soportado por una compleja organización de programas informáticos y una base de datos, además de equipos informáticos y de otro tipo. Por lo tanto, un GIS es un conjunto organizado de recursos tales como programas informáticos, tipo base de datos, programas de captura o programas de análisis y consulta. Pero el GIS no es sólo el programa o el sistema informático que posibilita la obtención de los mapas. El GIS es el conjunto de todos los elementos hacen posible obtener mapas y el análisis de estos, incluyendo los datos. Por lo tanto, un sistema GIS es un conjunto de recursos que posibilitan la gestión y análisis de datos referenciados espacialmente mediante coordenadas, contenidos en una base de datos, y que su consulta y análisis se realiza fundamentalmente a través de mapas.
En los años sesenta y setenta la representación en el ordenador del espacio geográfico se realiza con una rectícula formada por la división del territorio en cuadrículas regulares. Con colecciones de rectículas superpuestas, una para cada tema, se crea un modelo que permite realizar análisis y simulación de las políticas de ordenación del suelo u otras gestiones. A principios de los ochenta surge la técnica vectorial, con la cual, un río o una carretera se representa por un conjunto de puntos que forma una línea quebrada. Igualmente, una parcela de terreno se representaba por el conjunto de coordenadas de los vértices que forman el perímetro de la parcela. Esta técnica se desarrolló rápidamente al ser también útil en otros sistemas tales como los sistemas de diseño con ordenador (CAD). A mediados de los ochenta se inicia la comercialización de imágenes procedentes de los satélites Landsat y Spot recuperando la técnica de representación de la cuadricula que había caído en desuso, pasando a convivir con las nuevas técnicas vectoriales.
A principios de los años noventa el desarrollo de los entornos gráficos, da lugar a incorporar al GIS de elementos multimedia, tales como, fotos, ficheros de sonido y vídeo. A finales de los noventa las telecomunicaciones Internet, la telefonía móvil y el GPS son incorporados a los sistemas GIS convirtiendo a estos en una potente herramienta de gestión y difusión de información geo-referenciada.

Evolución de los productos informáticos
La primera etapa de los productos informáticos que posibilitan la creación de sistemas GIS abarca desde sus orígenes hasta principios de los años ochenta y se caracteriza por productos procedentes de equipos de investigación en las universidades y con destino a trabajos de investigación e innovación. La característica principal de estos sistemas es su desarrollo integral y su incapacidad para comunicarse con otros sistemas; es la época de los llamados sistemas propietarios. A mediados de los ochenta aparecen sistemas para construcción de GIS sobre plataformas de bajo coste, tales como, los ordenadores personales y las estaciones de trabajo. Esto posibilita su uso en proyectos con menor presupuesto, y las empresas que primero incorporan estos sistemas son las de ingeniería para el desarrollo de proyectos, generalmente vinculados al medio ambiente y el urbanismo. En esta época surgen los sistemas de CAD de bajo coste, que son utilizados en tareas complementarias de captura de datos para los sistemas GIS.
A principios de los noventa surgen, por un lado, los sistemas orientados al objeto y por otro los sistemas de GIS personal, denominados DM (Destok Mapping). En el primer caso suponen un avance al flexibilizar su aplicación debido a su tecnología, y en el segundo posibilitan la expansión del GIS entre profesionales relacionados con el territorio, prescindiendo de los administradores y técnicos especialistas.
A mediados de los años noventa surgen como productos para sistemas GIS, librerías y componentes que pueden ser ensamblados con lenguajes de desarrollo informático de propósito general como el lenguaje C++, Visual Basic, Java o Delfi que posibilitan la creación de aplicaciones independientes para GIS, con un coste por usuario nulo, o muy bajo, posibilitando el desarrollo de aplicaciones para grandes volúmenes de usuarios a costes reducidos para su distribución en CD-ROM. A finales de los noventa los servidores de bases de datos (DBMS) posibilitan la creación de sistemas GIS por integración de productos suministrados por diferentes proveedores. Esto es posible gracias a la incorporación de indexación espacial y la implantación de los estándares promovidos por el consorcio OpenGIS.
En la actualidad la característica fundamental de los productos para la creación de sistemas GIS, es su alta especialización y su capacidad de integración con productos de otros proveedores. Con esto, se reducen los altos costes que suponen los productos integrados de un solo proveedor, al situar al cliente y usuario del sistema cautivo de una decisión tomada hace años y que lastra el desarrollo del GIS actual. Sin duda, en el futuro la integración de productos de diferentes proveedores será la característica fundamental del mercado.

Francisco Javier Moldes, Consultor y profesor de GIS de la Universidad Alfonso X el Sabio (fmoldteo@uax.es)

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

ny2 ACTUALIDAD

ny2 Sociedad de la información

Día de la Movilidad y el BYOD Coffee Break